Capitulo 42

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Después de pasar dejando a Niall y a Josh a su casa, me acosté en la ultima fila de asientos de la camioneta gracias al espasio que Josh había dejado libre. Nos esperaba un viaje de aproximadamente una hora a la casa de mis padres.

-¿Harry se durmió?- escuché a mi mamá preguntar a Gemma. Ella asintió con un "mhm", pero en realidad yo no estaba durmiendo, o eso era lo que me preguntaba. Había vivido ese momento antes, cuando sin que ella lo supiera la besaba y tocaba el cielo con sus labios. Había sentido y vivido ese momento en mis sueños varias noches y esa sensación de hacer un sueño realidad era fantástica y la realidad era más dulce que mil fantasías.

No pude dejar de revivir ese momento hasta que un "ya llegamos Harry" me interrumpió. Le deseé buenas noches a mis papás y a Gemma y todos nos dirigimos a dormir ya que estábamos muy cansados.


Entré a mi cuarto y me recordé de llamar a Zack. Al recordar lo que me había dicho me preocupé y un sentimiento horrible entró en mi pensando en que sería eso tan serio con respecto a Abby que tenía de decirme. Marqué dos veces a su numero pero no me respondió. Miles de cosas pasaron por mi mente en ese momento. ¿Se regresaría a su país? Dios mío, si eso pasaba sería el fin del mundo. El fin de MÍ mundo. Pero segundos después usé mi cerebro y supe que eso no pasaría ya que ella había firmado un contrato de dos años con nosotros. Ni siquiera había pasado uno así que me sentí aliviado. Pensar en que sería eso tan serio que Zack debía decirme no me llevó a ninguna conclusión así que lo único que pude hacer fue mandarle un mensaje diciéndole que me hablara lo más pronto posible.

El mensaje se envió e instantáneamente mi mente volvió a enfocarse en el momento más emotivo que había tenido en los últimos años. No sabia si llamarla porque ¿que le diría? no le hablaría normal después de lo que pasó. Pero si no lo hacía ella pensaría que para mi no significó nada.

Necesitaba a alguien para contarle esto. Gemma estaba en la siguiente habitación pero no, mi hermana no sería la persona adecuada para contarle algo así. ¿Louis? no. Louis siempre me hizo sentir como un idiota las pocas veces que hablé de temas amorosos con el. Era tan inmaduro y usualmente no tenía seriedad conmigo. Eso me molestaba. ¿Liam? todos sabemos que Liam era el más chismoso de los cinco. Eso nunca pasaría. ¿Niall? el pequeño e inocente Niall. El era como mi hermano pequeño así que tal vez podría confiar en el y contárselo pero no pedirle consejos. Solo quedaba Zayn. El era la unica persona más o menos normal que tenía a mi alrededor. Con Zayn siempre teníamos conversaciones profundas y el era como un verdadero hermano mayor ejemplar a comparación de los otros chicos. Eso no quería decir que a ellos no los quisiera pero Zayn de alguna manera se había ganado mi respeto y confianza. En ese momento probablemente el estaba durmiendo así que deicidí no molestarlo.

*Narra Abby*

Entré a mi casa y me encontré con Zack en la sala. Dios, si había visto algo estaba muerta.

-Hola- sonrió.

-Hola- respondí de la misma manera. Apagamos las luces y subimos juntos las gradas para llegar al segundo piso.

-¿Contenta?- preguntó.

-Si- respondí.

-Bueno, yo estoy demasiado cansado así que me voy a dormir- dijo. Nos despedimos y se dirigió a su habitación. Gracias a Dios el no estaba ni enterado de lo que había acabado de pasar. Me dirigí a la habitación donde estaba mi mamá, hablamos un par de minutos y luego me dirigí a la mía para descansar. Podía jurar que la sonrisa en mi rostro era inmensa. Entré y cerré la puerta con mi espalda pegada a ella.

-No puedo creerlo- susurré para mi misma recordando ese mágico momento. Suspiré y al dirigir mi vista al frente me encontré con un enorme ramo de rosas en mi cama. Lo miré extrañada mientras me acercaba a verlo. Eran hermosas y el ramo era frondoso. Busqué alguna carta para ver de quien había sido el encantador detalle y justo debajo del pesado ramo encontré una tarjeta.

"Deceo que este día haya sido especial para ti

así como tu lo eres para mi.

Espero que te gusten las rosas y también

los anillos (se cuanto te gustan)

¡Te quiero muchísimo Linda!

Harry xx"

Esas palabras estaban escritas con su puño y letra y tenía unos cuantos corazones dibujados alrededor.

-No dejas de sorprenderme- susurré mientras veía las rosas y la carta que tenía en la mano. Tomé el paquetito de anillos que estaban debajo de la carta y eran exactamente de la misma marca de la cual yo tenía saturado mi joyero. Los observé y justo en ese momento recibí un mensaje.

"De: Harry

¿Te gustaron las rosas? xx"

"Me encantaron... tendrán su lugar en el centro de la sala. También los anillos, no tenías que molestarte Harry" respondí.

"De: Harry

Se cuanto te gustan ¿Cual es tu favorito?"

"El de la corona" respondí después de ver los seis anillos que traía el paquete.



*Narrador Omnisciente*

Estuvieron hablando por mensajes hasta que después de bajar a poner las rosas en agua, Abby se quedó profundamente dormida. Ninguno de los dos mencionó el tema del beso ya que Harry creía que era mejor hablarlo de frente.


*Narra Harry*

Las fiestas de año nuevo habían terminado y el nuevo año había empezado. Nos encontrábamos en el tercer día de enero y hoy la familia de Abby regresaría a su país. En la mañana la sorprendí en la puerta de su casa y ofrecí acompañarlos al aéreo puerto. Llegué a tiempo ya que estaban a punto de salir.

-Buenos días Harry ¿verdad?- me saludó su mamá tratando de recordar mi nombre.

-Si- sonreí. -Buenos días, déjeme ayudarla- le respondí tomando su maleta.

-Gracias por la caballerosidad, eres muy simpático- respondió y yo sonreí.

Nos dirigimos al aereopuerto y después de una conmovedora y dura despedida el avión se fue. Mis ojos se aguaron al ver como se despedía de su mamá y de sus hermanas. La voceadora llamó a los pasajeros del vuelo 90 y entonces se fueron. Ella y yo nos quedamos viendo como subían al avión y minutos después este emprendió el vuelo para desaparecer de nuestra vista. La cubrí con mis brazos envolviendola en un gran abrazo para hacerle saber que yo estaba con ella.

-Todo va a estar bien linda y siempre estaré aquí para ti- le susurré y ella asintió con la cabeza. Nos soltamos y ella me dio una débil sonrisa de lado. Me dolía ver que estaba así. -Vamos- le dije y nos dirigimos a mi camioneta.

En el camino la radio llenaba el silencio entre ambos. Para mi era un poco incómodo porque no sabía si era adecuado hablar o simplemente quedarme en silencio mientras que ella estaba perdida con la mirada clavada en el vidrio del carro.

Llegamos a un restaurante y me parqueé. Apagué el carro y dirigí mi atención a ella. Ambos nos vimos a los ojos.

-¿Vamos?- le pregunté dándole una sonrisa. Ella asintió sonriente y nos bajamos. Ambos ordenamos una hamburguesa y la mesera se fue.

-Los usaste- dije observando los anillos que estaban en sus delicados dedos.

-Si- sonrió acomodándolos.

Mientras almorzábamos traté de hacerla reír con chistes o cualquier cosa y al parecer ella era una de las pocas personas que encontraban gracia en mis chistes. Terminamos y regresamos a mi camioneta para dirigirnos a su casa y en ese momento yo abriría el tema que no habíamos tocado en días. Estaba muy nervioso y al mismo tiempo sentía miedo. Mi corazon se quebraría si descubría que para ella no significó nada.

Al parecer llevaba varios minutos pensando en esto ya que al salir de mis pensamientos me di cuenta de que ella me miraba raro.

-¿Estas bien?- me preguntó.

-Si- respondí y ella rió.

-Abby- llamé.

-¿Si?- atendió ella dejando de ver el vidrio para dirigir su atención a mi.

-Tenemos que hablar- dije apoyando mi mano encima de la de ella que descanzaba en su pierna, cerca de su rodilla. -Necesito que seas honesta conmigo así como lo seré contigo- continué y ella asintió. -No había hablado esto contigo porque quería decirtelo de frente así que te lo diré- dije y ella rió dejando de verme.

-Lo siento- dijo avergonzada llevando su otra mano a su frente.

-Estoy hablándote en serio Abby, no es divertido- dije.

-Lo siento, lo siento. Sigue- se excusó. -Sigue- volvió a decir cuando esa sonrisa divertida desapareció de su cara. Se estaba riendo de mi.

-¿Ya no vas a reirte?- pregunté.

-Ya no, lo prometo- respondió acariciando mi mano con su pulgar. Suspiré volviendo a tomar coraje para hablar. Dios, había cortado mi inspiración.

-Conozco a muchas personas e incluso tengo amigos para los cuales un beso no significa nada- comencé. -Ellos pueden besar a alguien y luego pretender que nada sucedió, y yo solía ser uno de ellos pero no se cuando o cómo mi forma de pensar cambió.- Expliqué y esta vez ella me escuchaba atentamente. Llegamos a su casa y entonces apagué el carro para poder verla a los ojos. -Hemos sido amigos desde que llegaste, bueno no desde que llegaste pero hemos sido amigos por varios meses y no se si lo has notado o no pero mi cariño hacia ti no es de amigos y creo que nuestra relación tampoco lo es- solté y vi como una pequeña sonrisa tímida salía de sus labios. -Tu llegaste a dar vuelta a mi mundo, aunque no lo creas me has hecho ver la vida de una manera distinta y has cambiado muchas cosas en mi, puedo decir que me has hecho una mejor persona y para mi ese beso fue especial y significó más de lo que te imaginas linda- dije viendola directamente a los ojos. Ella sonrió y dirigió su vista a nuestras manos y movió su mano para entrelazar nuestros dedos. Era la primera vez que nuestros dedos se entrelazaban.

-Me he dado cuenta Harry y lo que siento por ti es tan fuerte como lo que tu sientes por mi. Al principio trataba de convencerme a mi misma de que no era lo que yo pensaba que era pero cada vez fui convenciendome más de esto y aquí estamos ahora- dijo viendo nuestras manos. Yo me acerqué y le di un beso en la mitad del labio.

-¿Bajamos princesa?- pregunté ya que ya habíamos llegado a su casa.

-Si- respondió extrañada y sonriente por la forma en la que la había llamado y bajamos. Cuando entramos ella suspiró y se dirigió a la cocina y yo la seguí. -No se como voy a acostumbrarme a estar sin bulla otra vez- bufó entrando. Yo la abracé por detrás de la cintura haciendo que girara para que estuvieramos de frente y nuevamente nuestros labios estaban cerca.

-Yo te puedo ayudar- susurré acercándome y nuestros labios se unieron en un beso hasta que nos separamos por falta de aire. -Te amo- dije envolviendola en un abrazo.

-Te amo tambien- respondió entre mis brazos.

Después de nuestro abrazo nos dirigimos a preparar te para luego ir a la sala a ver televisión. Abby puso un canal en el cual estaban dando un programa de belleza o algo así. Ella estaba recostada en mi pecho mientras que yo permanecía sentado acariciando su cabello.

-Entonces ¿quieres ser mi novia?- pregunté cuando dieron anuncios. Ella levantó su rostro para verme y rió.

-¿Asi que eres de esos que de primero roban un beso y luego se declaran?- dijo. Yo encogí mis hombros sin saber la respuesta. -Si, me encantaría ser tu novia- respondió y yo le dí un pequeño beso en los labios. El programa comenzó otra vez y yo busqué su mano para tomarla y mientras ella miraba la televisión yo jugaba con sus dedos dándole vuelta a los anillos que tenía en ellos.

*FIN*

¡Hola chicas guapas! Espero que se encuentren bien :) Espero que les gusté el capítulo y bueno... Estos dos ya son novios pero pasará algo un poco preocupante :S si quieren saber que es lo descubrirán en el próximo capítulo :) ¿A quienes les gusta HABBY? Pues a mi me encantan porque son como tiernos y lindos asdfghjklñ Voten y comenten chicas guapas ;) ¿Qué será eso que Zack le va a decir a Harry? LAS AMOOOOO :*
Si quieren ver los anillos les dejo este link donde los pueden ver y comprar si quieren :) están chulos http://www.hellomissapple.com/collections/rings?page=2

Unexpected Romance (Harry styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora