Just you... (Justin y _____) | PAUSADA |.

#Capitulo 5.

Volvimos a sonreír y él se dio media vuelta para irse a su departamento, cerré la puerta y sonreí intencionalmente, eso fue muy lindo...

-Ya, ya, basta, no te ilusiones, ¿qué pasa? apenas lo conoces ayer, _____.

Suspiré y después de cerrar totalmente la puerta, me dirigí a la cocina a preparar el café, como hacía frío decidí preparme uno. Mientras preparaba el café, miré el reloj de la pared y eran las 9:50 a.m. faltaban diez minutos para las 10, y Abby vendría a las 11:30 a.m. así que quedaba una hora y media para hacer lo que quisiera y no tenía idea de qué hacer así que tome mi café y me senté en frente de la puerta-ventana de vidrio que daba a una vista super linda de la mañana en New York.

Empecé a recordar las cosas por las que había pasado. Sólo tenía a mi hermana de 25 años como familia, pero ella vivía en Europa así que no nos veíamos muy seguido. Mi padre nos había abandonado cuando tenía tres años y cuando mi hermana Ashley tenía siete. Nuestra madre murió ocho años después, fue terrible para las dos. Después nos fuimos con una tía y fuimos creciendo con ella hasta que cada quien tomó caminos diferentes, yo me vine a New York y ella se fue a Europa, y pues aquí estamos.

Cerré mis ojos y después de unos diez minutos, me acabé el café y me dirigí a la cocina y puse la taza en el lavadero de los trastes para después ir al living, sentarme en el sofá y prender la televisión.

-Comida, infomerciales, comida, animales, tutoriales para decorar tu apartamento, comida, ejercicio.

Repetía mientras le cambiaba de canal ya que no había nada bueno que ver.

-¿No habrá un canal que diga "¿como conseguir novio en tres simples pasos?" que pueda ver?

Me pregunté a mí misma negando con la cabeza. Luego de estarme otros minutos pasando por los canales, me aburrí así que apagué el televisor y me levanté del sofá, cuando lo hice, el timbre volvió a sonar así que fui a la puerta y abrí.

-Muy buenos días, señorita Brown, llegó un paquete para usted. Firme aquí —dijo el cartero extendiéndome una hoja y una pluma para firmar, la tomé, firmé y él me entregó el paquete que era un rectángulo envuelto en papel— gracias, que tenga buen día.

-Igual, gracias a usted.

Sonreí leve y cerré la puerta. Me dirigí al sofá de living y me senté ahí para analizar el paquete.

~

Para: _____ Trevelan Brown.
De: Ashley Trevelan Brown.

Hermanita, aquí te envió unas cuantas cosas desde Londres, son fotos y un regalo, espero y te guste. Te extraño mucho, te quiero igual y un día de estos háblame. Cuídate.

~

Sonreí, Ash siempre me sorprendía, era la mejor hermana del mundo entero aunque ya iba a pasar medio año sin vernos, siempre siento que está a lado mío. En fin, abrí con cuidado el paquete y era una caja, adentro habían unas cuantas fotos de ella y de su novio, de su casa, de Londres, de varios lugares. Ashley era alta, castaña, delgada y con ojos verdes, era muy linda. Yo era de estatura media, igual castaña, delgada pero ojos marrones. Nos parecíamos un poco, no tanto para decir luego luego que éramos hermanas pero sí un poco. Después de ver las fotos, busqué más adentro de la cajita y había un brazalete, un collar y una bufanda. Eran totalmente hermosas las tres cosas. Estaba tan sentimental y me puse peor cuando encontré una pequeña carta hecha a mano por ella. La leí toda, me tomaron al menos cinco minutos para leerla y mientras lo hacía, empecé a llorar. Abracé la bufanda... era de mi madre.

Lloré, me desahogué, hace mucho que no lo hacía... necesitaba sacar lo que llevaba adentro. Cuando mis ojos estaban llenos de lágrimas, tocaron de nuevo el timbre. Me sequé las lágrimas, me levante con la bufanda en mano y fui a abrir.

-_____... cielos, ¿por qué lloras?