Punto de vista de ella.
Viernes por la noche mi madre pensó que iba a casa de Yasser. Lo cual no fue mentira pero lo que no sabía era que no me iba a quedar a dormir todo el fin de semana con Sandy.
Zayn pasó por mí y fue increíble. Paseamos, bailamos, reímos y hablamos en el día, y en la noche tuvimos encuentros románticos y apasionados.
-Mierda, Mad. Me encantas, ¿sabías?
Reí. Se veía tan endemoniadamente lindo, tierno y sexy. Su cabello despeinado y sus labios con un toque rojo e hinchado. Podía escuchar los latidos de su corazón.
-He estado pensando algo muy... ¿demente? -volteé a verlo, apoyando mi barbilla en su pecho.
-¿Si? Dime.
-Es... una sugerencia. No quiero que pienses que te estoy forzando o algo así. Tampoco quiero que me des una respuesta ya. -arrugué la frente, dudando. -Ya que es... ilegal. Aunque no por mucho tiempo.
-¿Qué es? Me estás matando. -sonrió, nervioso.
-¿Qué harías si te compro un anillo?
-¿Un anillo? Bueno, todavía no es mi cumpleaños como para un regalo y...
-Lo sé. Hablo de un anillo de compromiso.
Un silencio apareció. Me quedé helada.
-No te estoy diciendo que te lo voy a dar mañana o que nos casemos la próxima semana. Sólo es para recordarte, recordarme y, cuando creas que es adecuado y lo uses en público, recordarle a todos aquellos niñitos calientes que eres mía.
No pude evitar sonreír.
-Creo que sí te estás volviendo loco.
Sonrió.
-Cásate conmigo.
Mi corazón empezó a palpitar como si no hubiera un mañana. Zayn se enderezó, al igual que yo, sentados en la cama.
-He hecho cosas que nunca hubiera hecho sin ti. He sentido cosas que no hubiera sentido sin ti. Sería muy tonta si dijera que no.
-¿Eso es un sí? -asentí. -Mierda, ¡es un sí! ¡Es un sí! -gritó.
-Zayn, calla. Los vecinos te oirán. -traté de taparle la boca pero tomó mi mano y le dio un beso.
-Muñeca, yo no te dije nada todas las veces que gritaste mi nombre. Gracias a ti, ¡los vecinos ya saben quién soy! -reímos.
Al fin y al cabo, Zayn era algo más que sólo una calentura. Tenía en claro que lo quería a el. Todos los días. Todas las noches. Nada importaba, ni la edad; el me hacía feliz y yo a él. Y era todo lo que contaba.
----------------------
cómo les dije, aquí el final.
esta historia era corta desde el inicio, no porque dejé de escribir por un rato, significa que decidí acortarla. no. y perdón por mi laaaarga ausencia pero más vale tarde que nunca, ¿no?
bueno, es mi primera historia terminada y quiero darle las gracias a todas aquellas personitas que en su momento, votaron, comentaron y en sí, leyeron esta historia. gracias por todo su apoyo<3.
espero que me sigan apoyando en otras historias que o estoy haciendo o haré.
esto es todo por el momento, gracias de verdad<3.
ESTÁS LEYENDO
company [z. m.]
FanfictionDieciocho y veinticuatro. Dijeran lo que dijeran, la edad no les impedía pasar un buen rato de compañía. ADVERTENCIA: contenido sexual explícito.