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Sueños

Caminaba por la pradera, en un claro bosque frente a una inmensa colina, no tenia idea de que hacia allí pero por alguna razón sentía que debía seguir, es una de esas corazonadas que me dan de vez en cuando, la mayoría de las veces tienen razón.
Seguí por un camino curvo, pero al parecer la colina no se alejaba por mas que caminara, comprendí que no estaba caminando sino que caminaba sobre mi mismo lugar, me desconcerte bastante y me desespere, tome aire y conté hasta 11, (¿porque hasta 11? Bueno, el 11 representa el inicio de todo).
-Uno, dos, tres...
Me despierto y lo primero que escucho es "tacos", por alguna razón, esa palabra interrumpe cualquier cosa que este haciendo... Me levante enseguida (mala idea, cuando me levanto muy rápido me mareo) y conseguí ver una sombra corriendo y riendo al igual que una bruja maliciosa, escapa de mi pues mis mareos continúan, logro aclarar la vista solo para darme cuenta de que estaba completamente solo, pero se escuchaban unos murmullos entre debajo de la cama de mis padres, enciendo la luz y frente un espejo desaparece una sombra gigante con unos ojos amarillezcos inmensos observándome, alcanzo a distinguir algo al encender la luz pero para no destruir mi cordura me digo a mi mismo que fue por la vista confusa que tenía. Algunos momentos después, veo mi mochila de los recuerdos a un lado mio y saco mi cartera para observar la imagen que allí guardo sobre MG (Mi Galaxia) y yo, al calmarme dejo la imagen en su lugar y coloco la cartera sobre la cama de mis padres y bajo lentamente mi cuerpo hacía el suelo para asegurarme que no haya nada que pueda comerme...
-¡Como lo sospeche! No hay nada, ya debo dejar de comer panq...
-¡DISCULPA, ¿QUE DECÍAS?!-. Se escucha una voz proveniente de la oscuridad muy distorsionada, intento alejarme al instante pero es inútil, toma mi brazo y me azota hacia el suelo, «Señor Chirridos te mando, ¿no es cierto?» susurro débilmente. Guarda silencio unos segundos y me estruja para lanzarme por la ventana. «¡Cras!» Se escucha mi cuerpo al destruir la ventana y caer sobre el techo la casa siguiente. Me inco en un solo pie e intento sostenerme, noto que sangro por la boca y espero al temible soldado del Señor Chirridos de mas del doble de tamaño que yo que venga por mi. Me levanto y de mi bolsillo saco una pequeña piedra.
-¡Cori!-. Grito al ver romperse la pared entera y al enemigo casi encima de mi. Una espada azul se extiende en mi mano derecha y al hacerlo la sujeto con mis dos brazos. Coloco la espada rápidamente en mi guardia y espero que el skewir me ataque al transportarse, era obvio que no me atacaria por el frente con una espada en mis manos. Se convierte en polvo de sombra y veo su cabeza, la atraviezo con mi espada y no alcanza a lograr su cometido, su cuerpo se termina de teletransportar y cae de rodillas sobre el patio del vecino solo para esfumarse...
-¡Angel, ya es tarde! ¿no iras a la secundaria? Escucho a mi madre despertarme de mi sueño.