23- HORA DE HABLAR

407K 25.7K 4.2K
                                    

HORA DE HABLAR
***

Canción: Come to this - Natalie Taylor.
***


Vick a veces podía actuar más como una madre que como una amiga. Podía ser insistente y terca cuando quería, y si estaba empeñada en alimentarme era capaz de hacerlo por la fuerza. Fue por eso que permití que me llevara a rastras por el pasillo hasta llegar a la cocina. Me senté sobre la barra de desayuno y observé cómo deambulaba por el pequeño espacio y noté que parecía algo triste.

—¿Estás bien? —pregunté.

—Sí, solo algo cansada, supongo. También he tenido un día ajetreado.

—¿Quieres decirme?

—No es nada importante. ¿Tú estás bien?

—Sí. No. No lo sé —me quejé. Vick giró para observarme—. Operaron a mi papá hoy.

—¿De verdad? Oh, Dios. ¿Cómo está?

—Está bien. Todo salió bien, fue una operación menor, pero tenía miedo —admití.

Me encogí de hombros sin querer darle demasiada importancia y agaché la cabeza. Pocos segundos después, Vick ya se acercaba para envolverme entre sus brazos.

—Pero ya pasó todo, ¿no es cierto?

—Sí, eso creo.

Coloqué mis brazos a su alrededor cuando comenzó a frotar círculos sobre mi espalda.

—Entonces no estés mal. Si él está bien, ¿por qué tú no?

Suspiré.

—Gracias, Vicky.

Besó mi frente antes de dejarme ir y volvió a la tarea de preparar una cena sencilla. Cuando la vi acercarse con dos platos supuse que se había preparado algo también, pero entonces gritó el nombre de Levi y yo me tensé.

—¡Madsen, ven aquí ahora! ¡Debes comer algo!

No me atreví a voltear cuando los pies descalzos de Levi resonaron por el pasillo ni tampoco cuando se sentó a mi lado.

—Gracias —dijo en voz baja.

De reojo vi sus manos temblorosas tomar el emparedado y acercarlo a su boca.

—Debes ir al doctor —escuché que decía Vick en voz muy baja. Solo por curiosidad volteé a ver a Levi y me sorprendí al encontrarlo mirando a mi amiga con un odio absoluto.

Ella ni siquiera se inmutó.

—Cierra la boca, Vick.

—Levi, esto no es algo sin importancia.

—¿Ya vas a empezar otra vez?

Vick cruzó los brazos sobre su pecho y me sorprendí al notar que Levi se había cortado el cabello. Lo tenía casi al ras de su cráneo.

—Sabes que solo me preocupo...

—¡Pues no lo hagas! ¡No te preocupes, carajo! ¡Que les importe un bledo cómo estoy, métanse en sus putos asuntos! —estalló.

Se puso de pie de manera repentina y me hizo dar un salto del susto. El silencio se apoderó del departamento. Vick parecía no saber qué decir y yo no me atrevía ni a elevar la vista. Entonces Levi tomó el plato entre sus manos y salió de la habitación hecho una furia, sin dejar de maldecir todo el camino hasta llegar a su habitación. Aquella explosión me recordó a la que había tenido unos días atrás, cuando le pregunté por qué parecía tan cansado.

Siempre has sido tú ✔ (EN LIBRERÍAS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora