Marta empezó a contarme todo de nuevo. Que se había puesto sus vaqueros nuevos y que la recogió Alex, que al verla le dijo lo guapa que estaba y que le ayudó a montarse en su moto, me dijo que vivía alado mía y que no había durado mucho el trayecto en moto pero que le había encantado. Me dijo que la trató súper bien y que cuando llegaron a casa de Álvaro estaba llena.
Marta: Cuando entramos a casa de Álvaro, él empezó a saludar a todo el mundo y yo me sentía como que no encajaba ahí, me sentía súper incómoda y te eché tanto de menos. Pero en el momento en el que se dio cuenta de que no estaba cómoda, me cogió de la mano. ¡ME COGIÓ DE LA MANO TIA!
Clara: Por fin ha tenido el valor de hacer algo más que darte señales disimuladas
Marta: Sí, parece que le ha costado pero fue genial tía. Me llevó al centro del salón y estuvimos bailando, hasta que me preguntó si tenía sed y fue a por algo para beber para mí, pero vi que tardaba mucho y decidí ir a ver porque yo iba con él y no sabía qué hacer, debía de parecer tonta mirando a todos lados. Cuando fui a la cocina lo oí hablando con una chica diciéndole que le dejase en paz, que le gustaba una chica y que no quería nada con ninguna que no fuese ella. Entonces fue cuando se dio cuenta de que yo estaba ahí y acababa de oírlo. En fin, resumiendo, hablamos de eso, me explicó que le gustaba desde hace tiempo, pero que era más tímido de lo que parecía y que le daba vergüenza y pues yo le dije que a mí también me gustaba.
Clara: Y entonces te pidió salir.
Marta: ¡Sí! Me dijo las cosas que necesitaba saber, me dijo que iba a darlo todo por la relación, que quería de verdad que esto funcionase y pues le dije obviamente que sí.
Clara: Me alegro mucho por ti de verdad, me alegro de que por fin hayas conseguido lo que querías y de que él haya conseguido decirte lo que siente.
Estuvo contándome todo con todo detalle, hasta que dieron las seis y ella se tenía que ir a su casa donde la recogería Alex. Me alegraba mucho por ella, sabía lo mucho que a Marta le gustaba Alex y había estado segura siempre de que el sentimiento era recíproco. De repente me acordé de que había quedado con Óscar para hacer el trabajo y ni siquiera había revisado su ubicación, no sabía ni dónde vivía. Al abrir la ubicación vi que no vivía lejos de mí, vivía al final de mi calle, de hecho a solo un par casas de diferencia, no me lo imaginaba pero me venía genial, así tenía tiempo para recoger mi cuarto y cambiarme de ropa antes de irme.
Al llegar a casa de Óscar me di cuenta de que había pasado mil veces por delante de su casa, pero nunca me habría imaginado que vivía él ahí. Me abrió él, ya que le había avisado por Whatsapp que estaba alado, de hecho le avisé aún estando en mi casa, ya que su casa estaba a un minuto de la mía.
Clara: Que bonita tu casa, vivimos súper cerca y nunca lo había sabido
Óscar: Muchas gracias, probablemente sea porque vives en tu mundo –dijo riendo un poco, supongo que para que no sonase borde pero yo no vivo en mi mundo ¿no?-
Clara: Yo no vivo en mi mundo, pero tampoco voy pensando en quién vivirá en cada casa por la que paso, creo que eso es más normal –pensándolo así lo veía la cosa más obvia del mundo, nadie va pensando en quién vive en cada casa, quizás si ves una casa que destaca, pero no en una casa normal y común como el resto-
Óscar: Ahí tienes razón, bueno ¿empezamos el trabajo? Subo a mi cuarto a por mi ordenador y bajo, puedes sentarte mientras tanto
Clara: Perfecto, gracias
Mientras que Óscar subió a su cuarto, yo me senté en el sofá y disimuladamente por si bajaba me puse a mirar a mi alrededor, básicamente estaba cotilleando su salón pero en un intento de ser disimulada
Xx: ¿Qué haces tú aquí?
Clara: Joder que susto, he venido a hacer un trabajo con Óscar ¿Tú qué haces aquí?
Álvaro: Es mi casa, ¿qué voy a hacer aquí?
Clara: ¿Cómo que es tu casa? ¿Cómo es que vivís..
Óscar: Somos hermanos, vivimos en la misma casa, eso sí es normal.
Clara: ¿Sois hermanos? ¿Enserio?
Óscar: Y luego dices que no vives en tu mundo –dijo juguetonamente y dándome con el codo en forma de broma-
Álvaro: Os dejo solos parejita, pero tú gilipollas, la próxima vez que te traigas a tu novia te la subes a tu cuarto, no tengo porque ver yo a cualquiera en el salón de mi casa
Clara: ¿Estás diciendo que soy una cualquiera? –Y Álvaro ni siquiera hizo caso, directamente se fue del salón-
Óscar: Lo siento por esto, si prefieres nos vamos a mi cuarto donde no tengas que verlo más, es un idiota y no dice las cosas enserio.
Clara: Sería mejor, gracias. Sí, es un idiota, no merece la pena.
Avanzamos gran parte del trabajo, pero mi madre me llamó y tenía que irme, por lo que aclaramos que quedaríamos otro día para terminarlo. Mientras que salía de su cuarto yo solo pensaba en no tener que encontrarme de nuevo a Álvaro, pensaba que era un idiota y no lo conocía, ahora lo confirmo.
Pero como mi suerte destacaba por ser tan horrible tuve que encontrármelo, bueno no sé si eso se podrá considerar encontrarse, yo estaba a punto de irme cuando me llamó y me dijo..
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Almas gemelas
Romance¿Has oído alguna vez la leyenda japonesa del hilo rojo? Ésta cuenta que hay un invisible hilo rojo que conecta a quienes por algún motivo, están destinados a encontrarse. Se dice, que este hilo puede enredarse o apretarse, pero que jamás se rompe, p...