Trouble [Zodiaco] [Yaoi/Gay]

Shot

Todos habían tomado su rumbo.

Libra y Capricornio no se habían separado, no dejaban de hablar de sus obras literarias favoritas y recalcar lo mucho que tenían en común. A Virgo no le quedó de otra que seguir al par de tórtolos porque había un león merodeando para posiblemente cazarlo en cualquier momento.
Ya no se fiaba de Leo.

Por otro lado, Tauro y Cáncer habían ido al piso de arriba, el cual era bastante pequeño y el pelirrojo apenas cabía.
Escorpio había desaparecido de repente y Piscis se empeñaba en su búsqueda evitando a toda costa a Aries porque le ponía nervioso todavía.

Géminis había ido a asustar a Cáncer, dejando a Acuario con Sagitario y aunque lo nieguen, ambos estaban muy incómodos con aquel silencio de fondo.

Si, no todo estaba marchando tan bien.

Sagitario odiaba más que nadie ese tipo de situaciones. ¡Se trataba de su mejor amigo! Al cual abandonó por estar al lado de Géminis, aunque estaba claro que ni Libra ni Acuario lo hubieran aceptado, pero no era para alejarse de ellos.
Sus amigos solo se preocupaban por él y se sentían traicionados al no saber que se trataba del geminiano, su pareja.

Sabía perfectamente cuáles eran las intenciones de Acuario, lo conocía tan bien que sabía que tenía que disculparse primero porque su amigo no iba a hacerlo o al menos iniciar una conversación duradera.
Suspiró, él nunca cambiaba.

—Acuario —llamó su atención, aunque no se había dado cuenta de que Acuario no le había quitado la mirada de encima -, creo que los dos sabemos que tenemos una charla pendiente.

El otro asintió firme y confiado, se acercó un poco más a él, donde se encontraba una ventana que no estaba rota para sorpresa de los dos y miraron un largo tiempo a través de ella. Como si fuesen a encontrar en lo profundo del bosque las palabras correctas para iniciar.
Acuario se sentía tan extraño junto a él, era diferente estar a su lado desde su pequeño incidente.
Era como si sus ojos se hubieran abierto, pero no sabía que era lo que supuestamente se revelaba ante él.
Una sensación muy extraña.

Mientras más pensaba en ello, más se confundía y encontraba nuevos significados.
Pero había algo más.

—¿Sabes que estoy con...?