•CINCO•

10 1 1
                                    

Llevo una hora en el baño, genial, a alguien se le ocurrió poner un reloj en el baño, otro punto a la lista de idioteces en el mundo. Ya me estoy aburriendo, desde hace rato de hecho. Me decidí, voy a salir.

Dios mío santísimo! Esto es un desastre, toda la ropa tirada, mi maleta sigue intacta, pero él!

-Matt! Estas loco o que?!

-Ayúdame!- gritó cuando me miró.- Se escucha algo y no sé que es!

Y si, se escuchaban "pips" consecutivos por toda la habitación. Seguí el sonido, venía de abajo de la cama, ahí había una mochila negra, de Matt obviamente, no tenía nada así que supuse que ya había buscado ahí pero puede llegar a ser tan idiota que no buscó bien. No me equivoque, justo ahí había un comunicador que al parecer estaba recibiendo una llamada.

-Inútil! Ya lo encontré!- la cosa dejó de sonar.

-Ah! Gracias, yo, lo siento arreglaré este desastre.

-Espero que lo hagas!

-No, hablo en serio, prometo dejar más limpio de lo que estaba. Perdón perdón- decía mientras recogía la mochila y dejaba cosas adentro. Me sentí un poco mal por gritarle, en serio estaba arrepentido.

-Esta bien, gracias- murmuré, iba a entrar de nuevo al baño pero ahora metería un libro, entonces se escucho que tocaban la puerta, ambos volteamos, entonces se abrió. El mismo hombre regordete de hace un día estaba de el otro lado.

-Hola chicos, lamentó decirles que tendré que llevarme la televisión, ahora cualquier aparato tecnológico es un riesgo.- me giré para ver a Matt, no había notado que tenía una mano detrás de él donde supuse que sostenía el comunicador que había sido molestia hace unos minutos. - Lo sentimos, y bueno, adiós, gracias.- había otro señor bastante alto de el otro lado de la puerta, cuidando que no saliéramos corriendo y huyendo de lo que ahora es una completa cárcel para nosotros.

Después de que saliera con la televisión y volviera a encerrarnos aquel hombre, me giré para ver la cara pálida de Matt, maldito. Me acerqué solo para asegurar que lo que tenía atrás seguía siendo su maldito comunicador, y de nuevo no me equivoqué.

-Eso- dije apuntando al aparato.- eso está prohibido, ¿o me equivoco?- mi mente gritaba ¡Yo nunca me equivoco! Orgullo al cien.

-Sarah te pido que...- su mirada hacia abajo y sus nervios de repente desaparecieron ahora me desafiaba con los ojos, hasta vergüenza me dio. Tu peor error Matt... No conozco su apellido, bueno, fulano.- ¿Por qué lo dices?

-¿Qué me ibas a pedir?- Boom! te conteste con otra pregunta, toma eso idiota!

-Que te callaras porque tu voz es irritante- alzo la voz, Dios mío, me piensa gritar, ¿cómo es que con este hombre desaparece la paz como por arte de magia?

-Eso no decías cuando me mirabas a mis "ojos lindos". Y el único irritante aquí eres tú!

-Eso tampoco decías cuando te estabas muriendo de celos!- ¿Que? Que vergüenza!

-Yo..Emm..- no! No bajaría la mirada ahora! No ahora! -No es fácil!- trate de gritar pero esa frase salió más como un suspiro.- me obligue a mí misma a agachar la cabeza, ya perdí y tendré que encerrarme dos dias en el baño.

-No! No es fácil Sarah! Yo.. Yo sabía que...- se detuvo unos segundos pero no se movía así que retome mi postura y lo mire a los ojos, ya no era la única con bonitos ojos porque los de él eran hermosos. Así fue como cada uno disfrutó de la vista que tenía desde ese punto, pero los ojos dejaron de ser el centro de atención cuando comenzó a mirar mi boca, y sin pensarlo en menos de un segundo bruscamente me acercó a él. Me estaba besando! No! Dios!

Y sin más, me separe, cruce la habitación con paso rápido hasta quedar dentro de el baño, después de cerrar la puerta detrás de mí, comencé a llorar, ahora la bipolar debería ser yo. Sus palabras sonaban en mi cabeza y la imagen de él tan cerca de mi daba vueltas en mi cabeza.

<< No! No es fácil Sarah! Yo.. Yo sabía que...>>

¿Qué?
¿Qué?

***

Salí por la comida, después de escuchar el timbre.

-Sarah..- dijo cuando pase frente a él, lo ignore y volví a entrar para encerrarme y seguir así...

Durante dos días.

Sarah Donde viven las historias. Descúbrelo ahora