Capítulo 2

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Esto es una broma, no podía tener tan mala suerte. Si pensaba que este verano iba a ser un auténtico aburrimiento, estudiando en casa y de vez en cuando saliendo con alguna de mis amigas cuando volvieran a Zaragoza, ahora si que iba a ser mucho peor.

Yo en una ciudad sola con mis padres, sin conocer a nadie y además hablando un idioma diferente al resto de la gente, un idioma que no tengo ni idea de nada y que lo odio con todas mis fuerzas.

Mi madre ya me había dejado claro que por mucho que le insistiera, le gritara o le rogara, no me iba a dejar quedarme sola en casa. Me rindo. Adiós al verano de mi vida.

Entré en mi habitación y me acerqué al portátil que minutos antes había dejado en el suelo. Ya vería la película otro día total, iba a tener todo el tiempo del mundo. Saqué el CD de la disquetera y lo guarde en la caja, cogiendo así las demás películas de la saga junto con algunas otras películas que tenia en DVD y metiéndolas en uno de los bolsillos de la gran maleta.

Escuchar algo de música me ayudaría a llevar esto de una manera más fácil, busqué por por Spotify mi playlist favorita y presioné el play.

'Feeling my way through the darknees

Guided by a beating heart

I can't tell where the journey will end

but I know where it starts'

Avicii retumbaba por toda mi habitación, perfecto. El aleatorio hacia muy buen trabajo de vez en cuando.

Mientras seguía el ritmo de la música, me acerqué al armario de la ropa y empecé a escoger la ropa que iba a meter en la maleta para llevarme a Londres. ¿Que tiempo hace ahí? el mismo que aquí supongo, yo por si acaso me metía de todo.

Empecé cogiendo las dos torres de camisetas que tenia en la primera y segunda balda, serian al rededor de unas 30 camisetas. De manga corta, de tirantes, con la espalda al aire, de estampados, básicas, media manga, rota de hombros. Las guardé en el lado derecho de la maleta y seguí por los pantalones, cortos, vaqueros, de talle alto, negros, de colores, rotos, leggins. La verdad que tenia una gran variedad.

Iba llenando la bolsa pero aun quedaba espacio suficiente para algunos de mis jerseys favoritos. También mis faldas, chaquetas y el chandal.

No se para que me metía tanto zapato, si en realidad siempre me pongo mis vans azules marino, pero yo para la ropa soy un poco maniática y rarita, según mi madre.

Solo me faltaba meter la ropa de la piscina, el pijama y la ropa interior y ya habré terminado.

Al cabo de tres canciones, la maleta estaba terminada. Miré el reloj y ya eran las siete y media de la tarde. Me había pasado mas tiempo del que pensaba haciendo la mierda de maleta. ¿Y ahora qué? Pero si no se que hacer con mi vida, pensé.

Como si alguien me leyera la mente, mi móvil sonó.

-Hombre, pero si os acordáis de mi, que honor. -Espero que se notara mi tono irónico y mis amigas lo notasen. Llevaban tres días sin saber nada de mi y estoy segura que aún seria así si no fuera por el mensaje que le mandé a Rocío ayer por la noche, cuando escuché una canción del Justin Bieber este que tanto le gustaba a ella.

-GORDAAAAAAAA TE ECHAMOS DE MENOS. -Genial, están borrachas. - Ey, que por ahora el odio me funciona correctamente, no gritéis. -Sonó demasiado borde, mejor. -TIA NO TE PUEDES CREER LO QUE NOS HA PASADO, DEBERÍAS ESTAR AQUÍ, LA GUARRA DE ANA YA SE HA CALZADO A DOS, Y VAYA QUE DOS. - Pero esta chica es tonta o que narices le pasa.

-Pero no te he dicho que no me grites, PESADA. - Vale creo que me estoy pasando, la envidia esta pudiendo conmigo. -Perdón amor, no quiero ser borde. Pero tengo que hablar con vosotras, es muy importante. Luego me contáis vuestras aventuras por Ibiza, pero ahora pon el manos libres. -Le dije a Sara, intentando calmarme.

-Espera..¿ya?. Te escuchamos - Dijeron las tres a la vez.

-Bien..bueno..pues que.. - Suéltalo ya - Me voy a Londres.

Silencio. Más silencio. Miré la pantalla del móvil para comprobar que no se había cortado la llamada. -¿EN SERIO? - Vale, seguían ahí.

-Si Ro, mis padres me han decidido irse de vacaciones y no me quieren dejar sola aquí, así que me obligan a ir con ellos. - Ya no podía más, necesitaba desahogarme con alguien y este era el momento y ellas las personas adecuadas. Las lagrimas empezaron a caer por mis mejillas a una velocidad bestial.

-Eh gorda, tranquila. Es Londres, WOW. ¿Tu sabes lo que daría yo por ir ahí? Tienes muchísima suerte, deja de llorar que es una tontería. -Se le trababa la lengua según iba hablando y una sonrisa se apoderó de mi cara. Pero no era solo el echo de que me fuera de viaje, era que me sentía sola y por muy fuerte que parezca, tengo mi lado sensible como todas.

-¿Pero cuando te vas? Estarás de vuelta para mi cumpleaños, verdad. - Pregunto Ana.

-Me voy mañana y según mi madre estaremos mínimo un mes, pero intentaré estar de vuelta para celebrar tus dieciocho cariño. -Escuché como una de ellas cogía el teléfono y se escuchaban a las demás gritarle y reirse, seguramente porque la que había cogido el teléfono se habrá tropezado o les habrá enseñado una teta, según quien sea.

-Mica no tienes por qué preocuparte, todo va a ir bien. Solo es un viaje, a una ciudad mágica. Se que te va a encantar y te ayudará con el inglés. -Ese es uno de mis miedos- Solo van a ser unas semanas, y entre que recorres la ciudad y sus alrededores ya se ha terminado. Yo estaré de esperándote cuando vuelva, por que al final no me voy a ningún lado con Noel. Así que tranquila, va a ir todo bien y seguro que conoces a alguien de España. - Rocío tenía razón. No tenía razones para preocuparme tanto, a fin de cuentas tampoco era tan malo, pero el hecho de tener a mis tres mejores amigas lejos de mi, disfrutando y pasandoselo bien sin mi, me amargaba los días.

-Puedo llegar a ser un poquito exagerada ¿no? - le dije ahora riendo.

-Es normal amor, no tienes por que preocuparte. Sabes que te echamos mucho de menos, ademas no somos las únicas. Ayer Alex me preguntó por ti. -Escuché las risas de las demás cuando ella nombró a mi ex novio. Idiotas, pensé.

Las palabras de mi mejor amiga me tranquilizaron bastante, era lo que necesitaba. Tengo que dejar de rallarme tanto la cabeza y disfrutar, que tengo 18 años, no 13. Además no me hace falta nadie para hacer mis locuras y pasármelo bien.

-Gracias reina, gracias a las tres - Mi amiga repitió la ultima frase que le había dicho a las demás y volvió a conectar el manos libres. -TE QUEREMOS MICA- que haría sin ellas.

-Bueno basta de pasteladas, contarme de una vez vuestras idas de cabeza, me muero de ganas de saber cuantas veces a vomitado Sara, las veces que se a caído Rocío y quienes son los afortunados que han probado el maravilloso placer que da Ana en la cama -reí escandalosamente al escucharlas sorprenderse y reír a la vez. Sabía que había pasado algo así y muchas cosas más, las conocía demasiado bien.

Durante una hora y media me estuvieron contando sus mil batallas y liadas que les habían pasado, incluyendo lo que Alex les había dicho. Según Sara, no se ha liado con ninguna porque aun sigue enamorado de mi. Yo paso de tíos y paso de el, bastante he sufrido por su culpa como para que ahora me venga con que me echa de menos y que me quiere. Que me coma el peluche.

Una cena ligera y una ducha con agua fría fue el punto final, mi cabeza no daba para más y mi cuerpo tampoco. Abrí la ventana de mi habitación y escuchando el sonido de la noche, en el momento que me acomodé en la cama, mis ojos se cerraron. Mañana iba a ser un día muy intenso. Londres me esperaba y lo que yo no me imaginaba es que tal vez, alguien también.

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Pues aquí esta el siguiente. Espero que os guste. Votar y comentar y si lo pasais a vuestros contactos pues oye, mejor xd. LOVEEEEEEEEEEEEEEE!

HOTEL (PARADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora