Ella era extremadamente joven, una niña apenas entrando a la adolescencia y él un cretino por posar sus ojos en ella. Luego de que el padre de Kate Reigns junto con su madrastra hayan decidido tomar unas vacaciones y que la dejaran a cargo de su tío...
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* * *por que ustedes lo pidieron aquí esta el final ***
Dean bebió de su Red Bull una vez más. Otra lágrima cayó de sus ojos. Basta, llorar no regresara nada. Pero es que Kate lo había hecho débil, y joder, cuanto la extrañaba. Había llorado tanto que pensaba que se iba a deshidratar. La ausencia de Kate en la casa era algo que no se podía ignorar, y la necesitaba. Demasiado.
- ¿Dean?- la deliciosa melodía de una mujer llenó sus oídos. Y supo al instante de quien se trataba.
Se giró. Y la vio ahí, parada a mitad de la sala. Tenía una mochila en el hombro, y Roman estaba detrás de ella quien le sonrió débilmente. Kate se acercó hacia él con una rapidez que no vio y se lanzó a sus brazos. Dean la estriñó fuerte contra él, cerró los ojos y nuevas lágrimas cayeron, pero esta vez por felicidad. Kate lo hacía feliz.
- ¿Estas llorando?- preguntó ella, limpiando suavemente su rostro con las manos.
- Por ti. Todo es por ti,
Kate.
Y la besó. No le importó que Roman estuviera ahí, lo único que quería era poder besarla. Besarla y decirle cuanto la amaba.
- Te amo, te amo.- repitió él sobre sus labios.- tú me haces feliz, Kate. Por favor, no te vuelvas a ir de esa forma.
- No lo volveré a hacer. Te lo prometo.- rozó su nariz con la suya.- te amo. Mucho.
Roman apreció detrás de ellos. Tenía a Mónica rodeada de la cintura mientras trataba de decir algo, pero al parecer se le hacia difícil de explicar.
- Vamos, mi amor.- dijo Mónica, besándolo en la mejilla.- diles.
- Bueno.- los miró a ambos.- les debo una disculpa a los dos. Yo... eh, me comporté como un idiota ayer. Y después de todo, tienen todo el derecho de estar juntos. Así que, ámense.
- ¿Hablas enserio?- dijo
Kate, con los ojos brillosos. Ya no faltaba mucho para que se echara a llorar de la felicidad.
- Claro que si, cariño.- le sonrió.- te quiero, y si con Dean eres feliz, entonces no me interpondré en su camino.
- Gracias, Roman.- dijo Dean con una estúpida sonrisa en el rostro. Y es que no había parado de sonreír como imbécil desde que Kate volvió.
- No tienes que agradecerme nada.
Kate miró a Dean de una forma que lo estremeció.
- Ahora que todo está bien, ven aquí y dime cuanto me amas.
Dean sonrió y su cara se puso seria mientras el amor que sentía por ella lo consumía por dentro.
- Te amo, Kate. Y eso nadie lo cambiara jamás....
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Akjgdaksdgadhfajk shoro :') que belleza
Bueno baby's este es el fin ... ¡NO! es broma aun falta el epilogo
