El comienzo

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12 años más tarde...
El monasterio se encontraba oscuro, iluminado por el débil brillo de la vela que sostenía Catherine, además de vacío, parecía como si nadie hubiera estado allí durante miles de años, pero ella sabía que no se encontraba sola, y  gritó:
- Sal de donde estés y acabemos con esto.
Sus palabras resonaron varias veces en todo el monasterio, pero no pasó nada. De repente, Catherine sintió el frío tacto de una mano larga y huesuda en su hombro, se dió la vuelta y vió aquellos ojos rojos que la atormentaban desde siempre.
Catherine se despertó sobresaltada y gritando al ver unos ojos marrones que la miraban muy de cerca y entonces dijo:
- Bueno, no presenta nada raro, dentro de lo que cabe. Ahora la veremos mas detenidamente. Dijo el médico.
- Por favor, si usted es tan amable. Dijo el rey.
Catherine sabía quien era ese hombre, era su médico que venía todos las semanas a verla porque su padre (el rey) tenía miedo a que enfermara, pero ella le tenía miedo a otra cosa, y era ese sueño que soñaba cada noche. Al principio le daba mucho miedo pero poco a poco ese miedo pasó a la curiosidad, ya que quería saber la identidad de aquellos ojos rojos.
Al cabo de un tiempo, el médico ya le había hecho algunas pruebas y dijo que estaba dentro de lo normal, y así (el médico) se despidió con una reverencia. Después de esto, el rey se sentó en la cama( al lado de su hija) y le dijo:
- ¿seguro que te encuentras bien?
- Sí, perfectamente. Dijo Catherine mirando a la ventana, los rayos de sol entraban por aquella ventana e iluminaban el retrato de su madre. Catherine no conocía a su madre, ya que había muerto durante el parto, pero su padre siempre le decía que había sido una gran mujer, generosa con la gente y solidaria, y que debía haberla conocido, por eso cuando Catherine hacía algo incorrecto, su padre siempre le decía " Tienes que hacer las cosas bien para parecerte a tu madre" o "tu madre no se equivocaba nunca" y ella estaba harta de que le corrijieran siempre ya que nunca iba a ser reina, puesto que era la séptima hija de los reyes. Catherine tenía 4 hermanos y 2 hermanas, aunque parecía como si no tuviera ya que nunca le hacían caso, el mayor de los 7 siempre estaba con el rey porque él algún día también lo sería, 4 de ellos se iban a casar y su sexta hermana era tan hermosa que siempre estaba rodeada de chicos. En cuanto a Catherine tenía 12 años, la mayoría del tiempo la pasaba paseando por los amplios jardines del castillo o se pasaba las horas leyendo en su cuarto. Siempre le había fascinado lo prohibido por eso cuando iba a la biblioteca real,  iba a la estantería de "libros prohibidos" la mayoría de aquellos libros hablaban de magia, demonios, brujas....  Que era lo que siempre le había interesado, su padre no le gustaba que leyera aquellos libros ya que decía que no enseñaban nada bueno, por eso los leía a escondidas. Ella era delgada y esbelta, tenía los ojos grises y era pelirroja. La gente la conocía como la princesa solitaria, algunos decían que era porque no jugaba con niños de su edad y otros incluso le tenían miedo y no se acercaban a ella ya que tener el pelo del color del fuego se asociaba a la brujería y mucha gente creía que era una bruja pero esto solo eran falsos rumores.

Poco después, Catherine salió de su habitación, todavía en pijama y escondiéndose por los rincones del castillo para que nadie la viera, de repente cruzó una esquina y vió a su hermana Alice( la 6 hija) con cara de sorpresa la miró y dijo:
- ¿Qué haces todavía así? A las princesas no las puede ver nadie así vestidas, corre y arreglate.
-Si hermana. Dijo con cara enfadada
-Cath, ¿Sabes que hoy vienen Los duques de Beathwille? Que ilusión, se cuentan que tienen dos hijos bellísimos y uno es de tu edad, ya deberías estar pensando en ser una verdadera princesa porque pronto padre te casará y dejarte de tus estúpidas historias de magia. Le diré a tu modista que te ponga el vestido mas elegante que tengas.
- Yo no me quiero casar, tengo 12 años y como tu dices prefiero mil veces las "estúpidas historias de magia" a tus ñoñerías de princesa. Dijo Cath enfadada.
- Que sea la última vez que hablas así a tu hermana. Alice la miró con desprecio y se fue.

Catherine estaba ya harta de que se metieran en su vida y no le dejaran hacer lo que quisiera, ella no se quería casar todavía ni pensar en su futuro marido.
Después de desayunar y vestirse, fue a su cuarto a leer "leyendas antiguas" pero justo cuando iba a empezar, alguien llamó a su puerta.
-Adelante. Dijo Catherine.
La puerta se abrió y entró un criado de la corte.
-Princesa, perdona que le moleste pero su padre quiere que vaya a la sala del trono.
-¿Es algo importante?
- No lo sé, no me dijo que era, pero si el rey la llama debería ir a verlo. El criado cerró la puerta y se fue.

Catherine entró en una gran sala roja, a cada lado de la sala había 10 guardias y al fondo detrás del escudo de Borwestone, estaba aquel gran trono donde se sentaba su padre, cuando la vió le dijo:
- Hija acércate porfavor.
Ella se acercó con paso decidido y entonces su padre le dijo:
- Hoy como sabrás vienen los duques de Beathwille, se comenta que tienen un hijo hermoso de tu edad, así que espero que seas educada con él y no des la impresión de la "princesa solitaria"
- Si padre, ¿algo mas?
-Si, ¿ Has visto hoy algo fuera de lo normal en tí?
- Si, mi hermana Alice que tiene muchos pájaros en la cabeza. Dijo Catherine riéndose.
- Catherine eso no es propio de una princesa, ya te puedes ir.

La hija del diabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora