Capitulo 2: Divididos

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Este es el momento, al estar en el cielo no habrá forma de regresar sin haber cumplido su objetivo. Ian se encontraba en el infierno lugar donde llevaba años viviendo por no arrepentirse de daños que había causado en su vida pasada. Era un lugar donde alaridos irritaban a sus habitantes, donde la maldad era su mayor fortaleza, el fuego que emanaba el lugar era impresionante sentías como el calor entraba en tus poros y te asfixiaba lentamente, solo oscuridad había allí tanta que creías estar ciego, por eso sus únicos momentos de tranquilidad era cuando subía a la tierra a hacer maldades, habitar en el infierno es decisión propia fueron creados por Dios con una naturaleza buena, pero ellos se hicieron a si mismos malos.

estamos divididos en tres partes, la primera es el cielo donde solo viven: Dios, su hijo unigénito, sus Ángeles y quienes después de la muerte se arrepienten de sus pecados y pasan de ser criaturas de Dios a ser hijos suyos. Luego le sigue la tierra esta es el equilibrio del bien y el mal la lucha constante entre ambos en la que es nuestra decisión ver a cual de los dos dejamos entrar en nuestra vida ahí es donde nos encontramos nosotros. Por ultimo esta el infierno el peor lugar para vivir en el que estas condenado a estar allí por siempre si no te arrepientes de daños que hayas causado. 

Ian estaba mas nervioso de lo usual puesto que el cielo esta custodiado. No podía entrar, solo podía quedarse en el lado de la raya en el que no fuera visto porque si lo llegaran a descubrir las cosas no acabarían bien para el. El plan era el siguiente: salir del infierno cosa que era sencilla pues tenían permitido ir a la tierra a hacer maldades cuando quisiera, al estar en la tierra volar alto para cruzar la capa que separaba al mundo del cielo, aquí es donde las cosas se ponen complicadas. En el cielo hay un camino largo, al final se encuentran las puertas a lo celestial por donde no tenia permitido cruzar ya que estaba cubierta con Puritatem un polvo compuesto por pureza cosa que el no poseía y le impedía el paso. Sin cruzar la raya era la única forma de hablar con ella o al menos verla. Si ya tenia todo planeado lo único que faltaba ponerlo en marcha 

Lux et TenebraeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora