Kitten ~ l.s

Tres

Louis estaba a punto de irse a su trabajo, pero un Harry dormido lo detuvo.

Louis: (acariciando sus cabellos rizados) Bebé, ya me tengo que ir a trabajo. Volveré en un rato, lo prometo.

Besa varias veces la frente y labios de su novio antes de dejar la habitación y dejar su pequeña casa.

Después de unas horas, Harry se despierta. Se estira en la cama y deja salir un gran bostezo.

Harry: (refriega su ojo izquierdo) ¿Lou?

Al no recibir respuesta, sabe que Louis ya se había ido a trabajar.

Harry: (hace puchero, sus ojos se cristalizan) Loulou...

Estaba a punto de llorar hasta que encontró su chupón entre las sábanas. Lo colocó en su boca y bajó las escaleras para ir a la cocina. Se encontró una nota pegada en el refrigerador y la leyó:

"Te dejé leche de fresa, gatito. Disfrútala. Llego a las 5. Te amo. Louis."

Harry: (alza los brazos) ¡Leche!

Sin pensarlo dos veces, abrió el refrigerador y sacó un tarro lleno de deliciosa leche de fresa que tanto le encantaba. Maulló feliz y sin más comenzó a beberla. Meneó su larga cola con satisfacción.

Amaba la leche de fresa, como al igual amaba a Louis.

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