Nos volvemos a encontrar (Norminah Fic)

Todo por ti.

•Dinah's POV

Salía de darme una ducha realmente relajante, ya era tarde, así que decidí ponerme un pijama poco usual, ya que era de patitos, y eso significaba que ya no saldría de la habitación o probablemente alguien se burlaría. Acomodé mis cosas en mi cama y desde atrás, pude escuchar que alguien aclaró su garganta para que me diera cuenta de su presencia. Me asusté, y puse una mano en mi corazón mientras volteaba – ¡Dios Santo! Normani ¿Qué haces aquí? Casi me matas.

Ella me regaló una sonrisa sincera pero triste y luego suspiró – Lo que pasa es que más o menos me escapé de mi casa -Levanté una ceja sin verla y se retractó de inmediato- No, no me refería a eso... o sea, más o menos. Mis padres saben que no estoy en casa, y probablemente se imaginen que esté aquí, pero tuvimos una discusión, todo por culpa de Christian... Mi padre, decidió creer su versión de nuestra ruptura, y traté de explicarle, pero traicionó mi confianza al ponerlo a él en frente de mí, ante toda situación, e incluso me golpeó el rostro, mi madre trató de defenderme, pero salí de ahí, odio que discutan, así que le pedí permiso a tu mamá y dijo que no había problemas con estar unos días aquí.

Tomó un respiro luego de soltar todos los hechos y sacó unas lágrimas – No, no, Mani no llores por favor -susurré y corrí hasta su cama, acariciando su espalda para que se tranquilizara.

Ella me abrazó, y luego de unos minutos sin movernos, la alejé, en lo que ella bajó la mirada – Dinah, no sé qué es lo que he hecho mal... Trato de ser buena hija, cuando me equivoco tiendo a repararlo y todo por ellos. Mi mamá es comprensible, ¿Pero él? Casi nunca estaba en casa, pero a veces moría de sueño y esperaba hasta noche para platicar con él, contarle mi día... Pareciese como si está arrepentido de haberme adoptado Dinah, y eso se siente horrible- Para ese momento, ya había roto en llanto.

Me rompía el corazón verla así, y suspiré tomando aire, y con este, fuerzas, para no quebrarme junto a ella. Sabía que tenía que llorar y desahogarse hasta agotar el sentimiento de tristeza que le nublaba la mente, por lo que dejé un silencio para que se sostuviera de mí, y supiera sin palabras que yo estaría para ella. – Mani, sabes que no me gusta verte destrozada ¿sabes por qué? Eres una chica increíble, que no merece estar así, verás que tu padre, tarde o temprano, se dará cuenta que, si sigue así, no tendrá más a la niña de sus ojos, porque estoy segura que eso eres, hija de sangre o no, sigues siendo su bebé, eso lo sé. No tiene la forma adecuada de pensar hacia ti, él no puede obligarte a algo que no quieres, ni mucho menos culparte. Si sigue así, se está perdiendo el tiempo maravilloso con su hija, y no creo que eso es lo que pretenda. Eres maravillosa, ¿sí? Y también eres importante para la gente que sabemos apreciarte.

No sabía de donde había sacado eso que acababa de decirle, pero se lo dije en verdad, eso es lo que sabía y sentía. Luego de un rato se quedó dormida. Puse mi alarma e hice lo mismo. Muy temprano en la mañana, mi alarma sonó. Me quejé un poco y en eso recordé la razón por la que la había puesto.

Me metí rápido a bañar y me vestí a lo que conocía como decente. Agradecí que al salir del baño Normani siguiera dormida, sin embargo, me acerqué para comprobar que tan dormida estaba- Mani... -susurré y no se movió, ¡Eureka! Tomé su celular, y aunque me sentía culpable y sucia por tomarlo sin su permiso, debía hacerlo. Busqué entre sus contactos a su padre, abrí sus datos, y apunté todo en mi celular: su lugar de trabajo, su dirección, en fin, todo. Salí de puntitas para que no se despertara y cuando ya estaba fuera de su vista, salí lo más rápido que pude a la calle. Había sacado dinero de mi alcancía, por lo que podía darme el lujo de irme en taxi. Le di la dirección al taxista y le dejé un mensaje de texto a Lauren diciéndole donde iba, recibiendo como respuesta "Te alcanzo allá".