Personajes:
·Raúl Gómez: 22 años. Mide 1.78. Pelo castaño, ojos marrones, piel blanca y delgado/fuerte. No tiene hermanos. Vive en Nueva York. Actualmente, vive con su madre ya que el padre se divorció de ella. Está casado con Elisabhet. Es educado...
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Miércoles, 3 de Agosto de 2016 12:30 pm
--Elisabhet, ¿te pasa algo? Te veo como pensativa.
--Mamá oculta algo.
--¿Qué dices?
·Elisabhet se acerca a Sara, que estaba fregando los platos·
--Verás, el otro día la escuché hablar por el teléfono con alguien sobre que hay que matar a quién se ponga en tu camino, que tiene que hacer bien el trabajo, que tiene que quedarse con ellas... ¿No te resulta raro?
--Hombre, diciéndolo así, sí. ¿Seguro que escuchaste eso?
--Que sí. Espera...
--A donde vas.
·Elisabhet fue a la habitación que costaba tanto abrir·
--¿Para qué quieres entrar en esa habitación?
--Quiero ver mejor las cosas que tiene -Elisabhet tiraba con fuerza del pomo y al fin se abrió-.
--Escucha, aquí sólo hay juguetes para bebés.
--¿Y eso que es? -Elisabhet cogió una caja que estaba en una balda-.
·Pusieron la caja en la mesa y empezaron a ver lo que tenía en su interior·
--Hay papeles y muchas cartas.
--¿Y quién mandaba tantas cartas? Sara seguía registrando-.
--De Beatriz.
--¿Qué?
·Comenzaron a leer todas las cartas·
"Hola Belén, Elisabhet y Sara empiezan hoy su primer día en el instituto". "Hola Belén, Sara ha empezado una relación con un chico". "Hola Belén, las niñas han discutido hoy y apenas se hablan, ¡ojalá se perdonen!". "Querida Belén, ¡Sara y Elisabhet se han graduado! Espero tu respuesta". "Hola Belén, Elisabhet se va a casar y querría saber cómo te ha sentado la noticia". "Belén, Elisabhet ya se ha casado con un apuesto chico. Debajo tienes algunas fotos. Quiero saber tu opinión".
--Todas son cartas de Beatriz.
--Ella le escribía todo lo que nos pasaba y a mamá apenas le importaba.
--¿Y cómo sabes tú que no le importaba?
--Todas las cartas están sin abrir.
--A lo mejor las leyó y las volvió a cerrar.
--Sara, estas cartas cuando las abres no se pueden volver a cerrar. Tienen poco pegamento, lo justo para cerrar.
--Vale, mamá pasaba de nosotras. Y ahora qué.
--Lo mejor es que nos vayamos para Nueva York.
--¿Qué? Yo no me voy.
--¿Qué te ha picado ahora, Sara? -Elisabhet colocaba la caja en la balda-.
