Te amo, weona (#1)

CINCUENTA Y DOS

[n/a: ponganle play a la canción en multimedia, sino aparece es Irresistible de One Direction.]

Te espero en la plaza al frente del kiosko!

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La Belén levanto su cabeza en busca del Javier, pero lo único que alcanzo a ver fue su mata de pelo corriendo como alma que lleva el diablo.

-¡Belén, apura la raja! -grito la Vale bastante alterada.

-Ya voy, culia. -dice la castaña metiendo un cuaderno y colgándose la mochila.

La Vale tomo a la Belu de la mano y la saco corriendo hacia el kiosko.

-Vale... espera... ¿El javo te dijo...?

-Callate y hace todo lo que te diga... no seai weona. -dice la más alta con su ceño fruncido.- No arruines esto.

La Belu bastante confundida se quedo callada y la Vale la guió hacia el costado del kiosko donde una hojita en forma de corazón estaba pegada.

-Tomala. -le dice la Vale sonriéndole suavemente.

La Belén lo hizo y sonrió.

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Hola, weoncia.
No puedo creer que te guste, no me puedo creer que me correspondai.

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La Belén miro a la Valentina esperando a que la llevara a donde estuviera el Javier.

-Vamos a seguir caminando.

En vez de haber cruzado altiro a la plaza, la Valentina la hizo caminar hasta el semáforo. En el semáforo también había pegado un papelito en forma de corazón.

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Se que a veces soy un weon de primera, pero admitamolos el que yo sea weon y tu una weona nos complementa perfectamente.
P.d: te haré caminar un poco, no te enojes♡

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La Belu se rió ante aquella boba posdata y cruzo junto a la Vale que iba contándole algo sobre que esto iba a encantarle y que no la cagara, le había repetido que no la cagara unas mil veces.

-No sé de que chucha estay hablándome, pero ya... no voy a cagarla. -dice divertida para luego posar su mirada en un papel rojo en forma de corazón pegado en la banca que le da inicio a la plaza.

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Aqui nos conocimos ¿te acordai?
Tu estabai sentada con la Vale, yo jugaba con el Dano a la pelota y por alguna razón tu y la Vale se pararon justo donde estábamos jugando y compraron un helado. Yo de aweonao tire mal la pelota y te dio en la nariz.
Te sentaste llorando en esta banca y yo vine a pedirte disculpas, me diste el tremendo combo en el hocico.
Asi fue como nuestra amistad empezó.

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La Belén y la Vale soltaron una enorme carcajada al recordar ese día, solo tenían unos 7 años cuando eso ocurrió. El Javier había estado con ella desde siempre y estaría eternamente agradecida por ello.

-Bueno desde ahora las cosas se pondrán más raras. -dice la Vale con un tono juguetón.

-No me asustes. -dice la Belu colocándose bien la mochila.