Aviones De Papel [Jerrie Thirlwards] |Pausada|

VII: Mentiras.

"Querida, Jade:
Leer tu avión de papel me hizo sentir mal, me di cuenta de que no merezco seguir viéndote, no soy quien crees..."

Borré todo de nuevo.

Aquella madrugada no encontraba dormir, estaba atormentada con mis propios pensamientos. ¿Cómo podía explicarle a Jade toda mi situación? ¿Con qué valor le podría decir que cada día moría un poco más? ¿Qué excusas tengo ante las acciones de mi padre?

"Querida Jade:
A veces las personas dicen mentiras para proteger a otros, ¿crees que eso esté mal?
He estado protegiéndote de mí, de las cosas que me pasan en mi día a día. No es justo para ti ver cómo me apago de a poco. Sé que es cobarde de mi parte huir así, pero no puedo herirte más de lo que ya mi padre lo hace.
Te tendré en mente hasta el final de mis días.
Atentamente: Perrie Edwards."

Mordí mi labio, evitando llorar. Hice la forma del avión de papel y me acosté hasta que el día llegó.

Mi papá no se apareció en la mañana y de alguna manera se lo agradecía, puesto a que no tenía valor de verlo.

Jesy me veía con lastima, aunque no le había comentado nada, mis ojos estaban rojos e hinchados.

—¿No saldrás hoy, linda?

Mi mirada estaba perdida en la ventana y, sin voltear a verla, negué suavemente.

—Necesito descansar.

Creo que se retiró de la habitación. Observé el atardecer y me pregunté si Jade estaba bien, si estaba esperando mi llegada y que quizás la estaba decepcionando.

Tenía un avión de papel para ella, ¿pero cómo podría entregárselo? No era lo suficientemente fuerte como para despedirme de ella.

Y así llegó la noche, conmigo perdida.

—¿Perrie?

Volteé y la chica morena de ayer estaba en la puerta de mi habitación con una sonrisa triste.

—¿Cómo me encontraste? —pregunté aterrorizada. —Espera, ¿escapaste de prisión?

Ella soltó una risita y negó.

—Soy Leigh Anne. —se presentó. —Soy cocinera en la prisión... conozco a tu padre y obviamente a Jade.

Ella se sentó a mi lado y dejó un avión de papel en la mesita de noche.

—¿Le dijiste a Jade...?

—No, no. —suspiró. —Tu padre habla de ti. Jade habla de ti. Cuando sucedió todo esto no me fue difícil unir los cables, pero entiendo tu posición y el porque no le dirías la verdad a Jade.

Fruncí el ceño y asentí. Le di con dolor el avión que había escrito en la madrugada y sonreí triste.

—Entrégaselo... y pídele que no insista conmigo. Soy un caso perdido.

Leigh suspiró.

—Ella no se rendirá, Perrie. —dijo suavemente. —Espero que lo reconsideres y vayas a verla para decirle la verdad.

Ella se fue y me dejó un nudo en el estómago. Ni siquiera abrí el avión de Jade, no quería saber su contenido.

He ahí otra mentira más.

N/A: No se esperaban otra actualización, ¿verdad? :'v Es una recompensa por esperarme desde septiembre de 2016. ¡Espero que les haya gustado!

-S.