Pasaron los días y Emy no daba señales de vida. Me estaba matando por dentro.
No había dormido bien y tenía anotaciones malas en clase por no estar atento, pensaba en ella cada momento.
Me seguía pasando por su casa y nadie abría la puerta.

ESTÁS LEYENDO
Te lo prometo
Novela JuvenilSiempre había querido empezar a escribir lo que pensaba y sentía en una hoja en blanco. Una hoja sin nada escrito. Una hoja donde yo podía escribir, dibujar, rayar o borrar cuanto quisiera. Una hoja sin ningún comentario que la gente te ponía a cerc...