Prólogo. (C)

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Prólogo

La Niña del Agua.

El barco llevaba unos minutos aminorando la marcha hasta que finalmente se paró. Nadie entendía por qué se pararon en medio de ningún sitio hasta que el capitán del barco entro en cubierta pidiendo un segundo medico con desesperación. Acababan de rescatar a una niña del agua.

—Cariño, tu eres pediatra, creo que es tu momento... —comentó una mujer morena a quien la acompañaba, mientras dejaba su copa en la mesa en la que estaban sentados.

La pareja se acercó al capitán, el hombre le dijo que era pediatra y el capitán les pidió que lo acompañasen hasta la enfermería del barco. Allí los esperaba el médico principal, en la camilla había una niña pequeña de no más de cinco años envuelta en varias toallas.

—Sigue viva, no sé cuánto tiempo debe llevar en el agua sola, pero está viva de milagro. Los niños no son mi especialidad, así que no se qué hacer. Es toda tuya. —dijo pasándole el fonendoscopio.

—V-Vale, yo me encargo. —aceptó poniéndose el copio alrededor del cuello.

Y en un visto y no visto, nuestro amigo se vio haciéndose cargo de la enfermería de su crucero de vacaciones. Cuando la chiquilla se calmó, el ahora medico/pediatra del barco la duchó para quitarle los restos del agua salada, la secó y la pesó. La niña estaba sana, solo tenía para sorpresa de todos, indicios de hipotermia. Así que lo que hicieron fue envolverla en una toalla grande y suave del spa. La niña no había perdido el conocimiento, así que estuvo totalmente despierta mientras el médico la revisaba, pero no dijo ni una sola palabra, por lo que nuestro amigo determinó que estaba en shock y que no entendía su lengua, puesto que solo se movía como él lo necesitaba si previamente él hacia el movimiento que necesitaba.

—Marina, cariño. Sé que estamos de vacaciones, pero me da que voy a tener que trabajar de urgencia mínimo durante los próximos tres días... —le dijo nuestro medico a su chica.

—Charlie, esa niña te necesita, una urgencia es una urgencia. Además, nunca viene mal practicar para el futuro ¿No? —respondió ella guiñándole un ojo.

El asunto de "La niña del agua" dio que hablar durante prácticamente el resto de la semana, no había tema más interesante de conversación entre los pasajeros. Se decidió que hasta que llegasen a puerto, de la niña se harían cargo Charlie y Marina. Cosa que a ellos les pareció bien. De hecho Charlie le dijo al capitán que si no les hubiesen dejado hacerse cargo de ella, se habría enfadado y hasta habría puesto una reclamación en el barco por falta de personal especializado.

La niña hablaba muy poco, se comunicaba más con gestos que con sonidos o por escrito. A penas tenía cinco años, por lo que era comprensible que le costase comunicarse. Aun así, consiguió hacerles saber a Charlie y Marina que su nombre era Cassandra y que como ya comentaba, tenía cinco años. Con eso fue suficiente hasta que llegaron a puerto.

Contaros la cantidad de llamadas, trámites, papeles y resto de cosas que tuvieron que hacer sería aburridísimo, así que antes de que avancemos al presente, os diré lo que todos estáis esperando. Sí, Charlie y Marina adoptaron a Cassandra. Y en el barco se montó una fiesta para celebrarlo.

Y ahora avancemos varios años, hasta la semana pasada, para ser más exactos.

{FANFIC} ¡VOZ NEGRO PERLA!: La Legendaria Princesa del Reino del Fondo del Mar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora