{FANFIC} ¡VOZ NEGRO PERLA!: La Legendaria Princesa del Reino del Fondo del Mar.

La Reunión Real de Los Siete Mares. (C)

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La Reunión Real de Los Siete Mares.

—Tenemos que hablar con Madame Taki. Reunión urgente. —dijo Rina.

— ¿Que está ocurriendo? —preguntó Nikora alarmada.

—Que está a punto de celebrarse una Reunión Real de Los Siete Mares. —respondió Rina seria. —Anoche llamé a las demás princesas sirenas. Pasado mañana se celebrará aquí la reunión. —dijo cruzándose de brazos.

— ¿Y cuando ibas a avisarnos? —Preguntó Luchia.

—Os lo dije anoche al llegar, pero sospecho que estabais tan cansadas que no os enterasteis. —Explicó la chica —Pero no importa, hablemos con Madame Taki y disfrutad esta noche de vuestras respectivas citas, a partir de mañana tenemos compromisos Reales urgentes que requieren máxima atención.

—Rina... —susurró Hannon sorprendida ante semejante demostración de autoridad. —Vale, vayamos a por Madame Taki. El resto ya se hará sobre la marcha. —Y salieron las tres hacia las escaleras, rumbo al saloncito de Madame Taki.

Madame Taki las estaba ya esperando cuando las tres chicas entraron.

—El mar no trae buenas noticias, princesas. —dijo nada más verlas entrar.

—Por eso venimos. Porque están pasando cosas extrañas en el agua. —afirmó Rina mientras tomaba asiento frente a Madame Taki.

—Marekai se mueve, princesas. Y el mar lo nota. El poder de la perla negra es cada vez más fuerte y él lo está siguiendo y no parará hasta encontrarlo —Madame Taki hablaba mirando fijamente su bola de cristal, ignorando la urgencia de la visita de las tres chicas.

—Debe celebrarse una Reunión Real de los Siete Mares con urgencia, Madame Taki. —Rina interrumpió dando un golpe en la mesa. —Necesitamos la verdad, para poder combatir a este nuevo enemigo. Porque claramente esto ya no es una leyenda. Ni Marekai, ni la Perla Negra. Hay otro reino, hay otra princesa. Ahora somos Ocho y debemos unirnos todas. La Reina del Agua nos debe demasiadas explicaciones... —dijo apretando el puño con rabia.

—Mis queridas niñas, comprendo vuestra confusión y enfado sobre lo que está ocurriendo, pero lo único que podemos hacer es esperar, de momento. —dijo Madame Taki con calma, mirándolas fijamente —Invocaremos al espíritu de la perla cuando las siete estéis aquí. Y podremos aclarar algunas cosas. Es lo único que puedo decir, mis queridas niñas. —dijo levantándose. —Hay gente en la puerta, deberíais ir a recibir a los nuevos huéspedes

Y justo en ese momento sonó el timbre en la entrada del hotel. Segundos más tarde se escuchó a Nikora salir corriendo hacia la puerta y las chicas bajaron justo a tiempo de ver como entraban por la puerta los nuevos huéspedes.

— ¡LUUUCHIA! —Gritó una chica, muy emocionada, justo antes de abalanzarse sobre ella. —Como te he echado de menos. Bueno, a todas. Me hizo tanta ilusión que nos llamaseis, ay. —La chica estaba realmente contenta.

— ¡Seira! Qué alegría verte —dijo Luchia abrazándola.

—Nosotras también estamos aquíii —dijo una chica rubia con una voz muy alegre y cantarina.

— ¡Coco, Noel y Karen también habéis llegado! Pasad, chicas, poneos cómodas. Y ahora preparamos las habitaciones. —saludó Luchia emocionada.

Minutos más tarde las chicas se acomodaron en dos habitaciones, Noel y Karen en una y Coco y Seira en otra. Para que Seira no se alarmase con el ambiente tan serio que había en el Hotel, esa misma tarde se fueron las siete chicas de compras acompañadas de Hippo en su aspecto humano.