No me dejes

Niega todo

Emma

Termino la noche con una gran cena la cual fue agradable con todos los chicos que expusieron sus obras, entre risas y consejos dieron las 9 de la noche, Evan y yo nos despedimos de todos, él se ofreció a llevarme a casa pero me negué, así que tome un taxi y justo cuando iba llegando pude ver todas las luces encendidas, le marque a Nina para que me hiciera el favor de mentir y decir que estuve todo el día con ella.

Entre y ahí estaba el sentado en la sala con su camisa desalineada y el cabello revuelto, se veía tan sexy así, vi que tenía una copa de lo que parecía era whisky, sorbió lo último se paró para poder mirarme a la cara, podía notar su enfado.

— se pude saber dónde estaba mi esposa ?

— hola, estaba con Nina, fuimos a dar una vuelta, después fuimos a nuestro club de lectores y a cenar.

Vi cómo se acercaba a mí y acariciaba mi brazo subiendo a mi cara para después levantar mi rostro y que lo mirara a los ojos.

— desde cuando mi esposa se ha vuelto mentirosa !!

Lo vi sujetar mi rostro y sus ojos se oscurecieron a un azul intenso, por un momento me dio miedo.

— no miento, si quieres puedes marcarle.

— pues lo haré.

Le marcó y tras confirmar que era cierto colgó.

—,que te pasa ?

— carmen me dijo que habías salido desde temprano con un hombre, el cual se llama Evan, quiero que me digas en este instante quien rayos es el ?

Carmen como siempre tan chismosa pero de esta nadie me salvaba, que haré, me sentí como un ratón siendo preso por un gato.

— Evan es mi nuevo estilista, salimos a correr y después me llevó a casa de Nina, no sé a qué viene el reclamo, además yo no te he dicho nada sobre porque anoche me dejaste plantada, así que, ni al caso, estoy cansada, hoy no quiero pelear.

Vi como su cara se tensó cuando le recordé sobre su ausencia del día anterior, no dijo nada como era de esperarse, tome mi orgullo y di la vuelta, escuche como me llamo pero nisiquiera gire mi cara, me di una ducha y al salir pide verlo sentado en la cama, no dijimos ninguna palabra, me acosté y pude sentir como se acercó a mí diciendo lo mucho que lo sentía, comenzó a besar mi cuello y acariciar mi pierna, sentí placer cuando comenzó a subir, estaba a punto de caer cuando los recuerdos de él con su asistente me invadieron, así que aparte su mano de mi.

— hoy no, no tengo ganas, estoy cansada.

Bese su boca y gire mi cuerpo dándole la espalda.

David

Jamás pensé sentirme de este modo, algo raro y extraño pasaba, Emma cada día era distinta, se arreglaba para verse bien, había noches donde llegaba temprano y no la encontraba en casa, otras donde se alistaba para salir, su manera de vestir distinta a lo tan acostumbraba que estaba y verla tan atractiva de nuevo sin poder tocarla, todas loas noches éramos dos extraños en la cama, comencé a llegar temprano a casa, de repente ya no me atraía como antes Julia, incluso ella comenzó a reclamarme por abandonarla pero realmente ni yo me conocía, quería ver porque razón mi esposa comenzó a cambiar tanto físicamente como sentimentalmente, porque razón salía algunas noches y llegaba muy tarde, que estaba pasando, acaso ella tenía a otro?.

Pasó un mes desde que mi esposa comenzó a salir y verse tan atractiva, hoy había una cena en el trabajo y decidí llevar a Emma, era la primera vez que llevaba a mi esposa a un evento social, al inicio pensé que no querría ir pero me sorprendió ver cómo acepto y fue a comprar un vestido para la ocasión.

— Emma, ya se nos hace tarde, tienes que darte prisa si queremos llegar, tengo que estar ahí en media hora.

Grite por las escaleras, me encontraba en la parte de abajo de la casa, había entrado a mi estudio y termine unos documentos para enviarlos pero Emma llevaba más de dos horas arreglándose, se nos hacía tarde, comenzaba a molestarme, estaba decidido a subir e ir por ella cuando la vi, estaba encantadora, llevaba un vestido rojo entallado al cuerpo y podía resaltar su asombroso cuerpo el cual se veía más marcado y reafirmado, al aparecer las clases con su instructor estaban dando buenos frutos.

— y bien, como me veo ?

— estás hermosa, luces encantadora.

Pude ver cómo se sonrojó ante mi halago y la verdad era que quería quitarle el vestido y hacerla mía.

— deja de verme así.

— así como ?

— como un depravado.

— y eso que tiene de malo ? Eres mi esposa, tengo el derecho a verte de esta manera.

— si pero me incómodas un poco.

— jajajajaja Emma, sabes recordé la primera vez que te vi, lucias tan encantadora y hermosa, pero hoy, juro que de no ser por qué tengo que estar presente en esa fiesta te quitaría el vestido y te haría mía.

— basta me sonrojas.

Estaba a punto de besarla pero vi cómo se apartó de mí, eso era algo tan común últimamente, siempre que quería tocarla o besarla ella se apartaba de mi.

Llegamos al salón donde se llevaría a cabo el evento de la presentación del nuevo modelo del auto convertible, la prensa estaba presente e invitada durante toda la ceremonia, al bajar del auto y abrirle la puerta a Emma vi como los flash disparaban como locos hacia nosotros, era como un destello de luces, tome a Emma de la mano y le ayude a bajar y ahí estaba ella tan elegante con su abrigo de piel blanco que la hacía ver hermosa y sofisticada, si vestido causaba admiración muchos fotógrafos la retrataron y ella elegantemente posó para todas las cámaras con su enorme sonrisa, en ningún momento la aparte de mi, escuchaba como todos le gritaban para que posara sola pero siempre la tome de la mano impidiendo que se alejara de mi, hice algunas entrevistas ante los medios antes de entrar y después avance junto con ella, se escuchaban algunos cumplidos hacia mi esposa, cosa que me causo celos, veía las miradas de los hombres como la desnudaban y me molestó mucho, intente cubrirla un poco con mi cuerpo pero era imposible no verla vestida con ese vestido rojo pasión y no sentir ningún deseo.

Entramos al evento y el lugar estaba sorprendente, en todo momento no la aleje de mi lado, conocía a la mayoría de los ahí presentes y sabía que estaba en zona peligrosa,  Emma me acompañó a cada lugar donde me movía, incluso estuvo a mi lado cuando di el pequeño discurso de bienvenida y presentamos el nuevo auto a todos los inversionistas y fanáticos presentes.

Pero verla comportarse con educación con todos los inversionistas que la saludaban y como preguntaba por el trabajo de producción sin miedo a sentirse fuera de lugar me sorprendió, al parecer tenía un conocimiento sobre autos cosa que me extrañó, jamás tuvo conmigo ese tipo de conversaciones, siempre que le hablaba de autos era como hablar otro idioma, nunca tuvo el interés hacia los autos y me sorprendió verla entablar conversaciones con algunos ingenieros y diseñadores industriales, era sorprendente, pero me pregunté de donde había aprendido eso, me sentí mal al no saber nada sobre mi esposa y vivir con ella, desde cuando empezamos a ser extraños?.