Historias de fantasmas fueron populares entre los habitantes de la URBE alumbrada con lámparas de querosén. La zona más comentada como sitio de apariciones fue en El Milagro.
La Maracaibo de comienzos del siglo XX era un vecindario en crecimiento, creyente de la fe católica y aferrado como la Venezuela de entonces , a los resabios populares y a los cuentos de camino.
Cuando no había television , y la luz electrica todavia era considerada una novedad, en las entradas los zaguanes se daban dialogos de espanto y brinco.
Esos dialogos eran de tradicion oral y del imaginario colectivo.
Carmen Rivas , una mujer que nacio en 1936 y vivió en el centro de ciudad, asegura que para los muchachos era prohibido pasar frente a los cementerios despues de las 08:00 Pm de la noche .
El Pasajero misterioso
Un hombre impecablemente vestido se subía, sin que nadie se diera cuenta, a los tranvias de mulitas , más tarde a los primeros carros Ford que llegaron por el puerto y a los tranvias electricos, por ultimo, se le vio en los flamantes automoviles y en los recientes y congestionados colectivos llamados Buses o Autobuses.
El pasajero misterioso se salto de carro a carro hasta que la modernidad lo permitio.Eso era verdad. Esta el muerto del alianza , y la mujer que aparecia frente a la cerveceria Zulia , se subia y desaparecia antes del hotel del lago.... Dicho por Guillermo Ávila, conductor de toda la vida de la ruta de el Milagro.
Los pasajeros fantasmas eran varios , como aquella que se montaba en el Sector La Calzada y se bajaba en el Club Naiguatá. En ocaciones , el alma en pena de una mujer que desaparecia cuando el chofer volteaba para cobrarle el pasaje.
Tambien la gente decia que en las madrugadas se veia a 3 mujeres vestidas de negro caminando por las cercanias de Santa Lucia, todas con flores en las manos y la cara gacha, oculta entre velos.
En las calles empedradas del popular sector se escuchaba hasta mediados del siglo XX, el andar de una carreta. El galope de caballos halando un carromato desvencijado de oia clarito por la calle Casanova.
En el Empedrao
Precisamente es en esta parte de la ciudad donde los cuentos se escuchan en cada esquina. Muchos atribuian el hecho a la cercania del cementerio que se ubicó a unos metros de la bajada de pichincha, la mas empinada de las vias de Maracaibo , que parte de la Avenida Bella Vista y atraviesa en una vertiginosa pendiente todo el barrio Valles Fríos.
" En la Calle San Luis sale un cura que vestia de negro " aseguran los viejos vecinos.