EN UN VIAJE #PNovel

1. Llegó el día

NATALIE

Mañana es el día, ya tengo mis cosas arregladas, mis maletas, mis libros, mi portátil y un montón de cosas más.

En tan solo un día... casa nueva, gente nueva, amigos nuevos (aunque mi mejor amiga me acompañará), ciudad nueva, universidad nueva.

—Cariño, la cena está lista.

—Voy mamá.

Decido enviarle un mensaje a mi mejor amiga.

YO: ¿LISTA?:) 6:45 pm

CAM: Listisima y tú? 6:45 pm

YO: También, ya casi ceno, nos vemos mañana en el aeropuerto, beso. 6:46pm

CAM: Vale *ansiosa* nos vemos!!! 6:47pm

Bajo rápidamente a la cocina, me ruge la panza con el olor a panquecas.

—Huele delicioso, dime que son panquecas con miel— pregunto abrazando a mi mamá.

—Acertaste, come antes de que se enfríe.

Mamá siempre tan preocupada... la extrañaré tanto. A veces me da un poco de tristeza dejarla e irme a otra ciudad pero serán solo dos años.

Después de la cena volví a mi cama, coloqué la alarma para levantarme temprano, debo estar en el aeropuerto antes de las 10 de la mañana.

Esa noche casi ni pude dormir por culpa de las ansias...

***

A las 7 de la mañana suena mi alarma y despierto de un salto, cepillo mis dientes, me ducho y empiezo a alistarme.

—Cariño, será mejor que bajes antes de que llegue el taxi—grita mamá desde abajo.

Siento una punzada de nervios, ya solo faltan horas.

Luego de bajar con mis maletas llamo a Cam al teléfono.

—Aló, bebé

—Hola Cam, llegó el día— digo emocionada

— ¡Sííí! No dejo de dar saltitos, ya casi salgo al aeropuerto. Nos vemos alla

—Vale, yo estoy esperando al taxi, nos vemos— cuelgo la llamada y escucho la corneta del taxi.

En el aeropuerto estaban varios amigos, mi mamá y los padres de Camila para despedirnos.
Luego de un par de lágrimas, abrazos y risas nos despedimos para verificar nuestros boletos.

—Sus pasajes señoritas— una rubia alta y sonriente nos entrega los boletos.

—Gracias— respondo cordialmente.

—Su vuelo sale en una hora.

Alejándonos de la multitud mi mejor amiga y yo nos sentamos en la sala de espera.

— ¿Estás bien?— pregunta mi mejor amiga Camila.

—Sí, un poco nostálgica pero bien.

Decido enviarle un mensaje a mi tío.

YO: Esperando, casi embarcamos ;). 9:00am

TÍO MARK: Las espero, sobrina. 9:02am

YO: Te aviso, ¿tú nos buscarás? 9:04am

Espero un un par de minutos y no responde, guardo mi celular y voy por un café.

Pasa media hora, los aeropuertos pueden ser un tormento, no me gusta esperar mucho.

—Ya solo falta media hora y comienza nuestro viaje— dice Cam sonriendo.

— ¡Sí! Ya le he avisado a mi tío, ayer me dijo que el nos buscaría al aeropuerto pero no ha respondido.

—Igual podemos tomar un taxi— propone.

—No creo saberme la dirección...

—Pues, pregúntale— dice poniendo los ojos en blanco.

—Si tal vez respondiera lo hubiera hecho, ¿no crees?

—Cierto— sonríe.

—Esperaré un poco y antes de subirnos al avión le llamo.

El altavoz nos avisó que debíamos embarcar al avión y fuimos directo a la puerta para que revisaran nuestros boletos.

Saco el teléfono y llamo un par de veces a mi tío pero nada que responde... caminando al avión siento mi teléfono vibrar y contesto.

—Hey, sobrina. Siento la tardanza, estoy en una reunión un poco imprevista.

—Hola, tío. No te preocupes, ¿ya saliste, no?

—Bueno creo que no saldré de aquí hasta un par de horas más.

—Oh...— ¿y ahora qué? Entro en pánico.

—Pero no te preocupes, enviaré a alguien a buscarlas y llegarán a casa sanas y salvas.

—Bien, nos vemos y gracias, ya estamos sentadas dentro del avión y debo apagar mi celular.

—Vale sobri, te veo en casa.