5. La fiesta

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ANDREW.

Eran las 8:00pm, Chris me avisó que vendría acompañado así que decidí venir por mi cuenta.
Recién empieza la fiesta, el Dj tiene puesta música electrónica, hay un montón de alcohol y pizza.

— ¡Hey Andrew!— me llamó Zac junto a un grupo de chicas.

— ¿Qué hay hermano?— saludé a todos.

— ¿Vendrá Chris?— Preguntó una de las chicas.

—Temo que viene acompañado— La cara de decepción de la chica fue un poema.

—Voy por un trago— digo y me dirijo a la cocina.

Ha pasado media hora, en la pista de baile las luces dan vuelta. Cada vez llega más gente. Recibo un mensaje.

Chris: Voy llegando. 8:35pm

—Hola Andy— me saluda Sussan abrazándome— ¿esperando a alguien?

—Hola Sussan, no, solo es a Chris— guardo mi teléfono. Ella no quita sus brazos de mí.

—Ahí viene— Apunta con el dedo libre de su bebida— Y muy bien acompañado, ¿quiénes son nuestras invitadas?

Veo a Chris y de un lado esta Camila, y del otro lado observo a Natalie... lleva un vestido negro y labios rojos.
Viene el recuerdo a mi mente de verla esta mañana con tan sólo una toalla, recién levantada...

— ¿Me estás escuchando?— Veo a Sussan.

—Claro— miento.

— ¿Me extrañaste?— preguntó Chris vacilando.

—Déjate de bobadas.

—Ya conoces a Natalie y Camila— Las señala y saludo sin importancia.

— ¿Y a mí nadie me presenta?— pregunta Sussan con su voz chillona. Y Chris empieza a decir sus nombres, se dan la mano y sonríen hipócritamente.

—Voy por bebidas, ¿qué prefieren ustedes dos?— pregunta Christian apuntando con la barbilla a Natalie y Camila.

—Vodka— responde Camila, mientras que Natalie se negó a tomar. Sussan se cayó a carcajadas.

— ¿Venir a una fiesta y no tomar?— burló.

—Trae vodka para las dos— dijo Camila.

—Andy vamos con el grupo— Sussan haló mi brazo y nos alejamos.

Después de un rato, un par de tragos y unas cuantas bailadas me senté junto a Chris, sus nuevas hijas, y el grupo.

—Juguemos a los retos— propone Zac.

— ¡Sííí! Tenemos invitadas nuevas— Dice Sussan. Al parecer a las chicas no les molestaban sus comentarios, ellas hablaban entre sí.

—Yo juego— dijo Chris.

—Y yo— dijo Jenn. Todos se pusieron en un círculo.

— ¿Ustedes juegan?— preguntó Zac.

Después de unas ojeadas con Chris, Camila respondió que sí y obligó a Natalie a jugar.

— ¡Yo empiezo!— gritó Jenn— Reto a Zac a echar tequila en el ombligo de Mary y chupar.

— ¿Tan rápido y ya estás encendida Jenn?— y así mismo hizo lo que le pidió.
Todos gritaron y aplaudieron.

—Sigo yo- dijo Zac— Reto a Chris a decirle algo sucio a la chica que tiene al lado— Chris se sonrojó y miró a Camila, a ella no pareció importarle. Él se acercó y dijo algo en su oído. Una vez más todos gritaron

—Chris, te toca— dijo Sussan.

—Jenn, te reto a hacerle un baile a Steve— Todos se rieron pero Jenn tuvo que beberse un shot de tequila por no cumplir el reto.

Era el turno de Steve.

—Sussan te reto a lamer el dedo de Andrew simulando sexo oral— Vi a Natalie y sus mejillas estaban coloradas.

— ¡Cómo si no lo hubiera hecho!— Gritó Zac. Y todos rieron.
Sussan agarró mi dedo y simuló su reto, todos reían y bebían más.

—Bien, me toca— dijo Sussan— Reto a la nueva a lamer el cuello de José— Natalie se impactó, casi escupe su trago, ¿lo hará?

Para mi impresión se paró de su asiento y se dirigió a José.

Se arrodilló y vi sus muslos, su piel trigueña de nuevo. Sus curvas se definían muy bien con ese vestido. Cuando subí la mirada observé como lamía el cuello de José y él lo disfrutaba.
Sussan lanzaba comentarios sucios y los demás gritaban.

—Creo que esta chica va a matarme— dijo José.

Era el turno de ella...

—Eh, no, yo paso. Prefiero ir a bailar.

— ¡Sí bailar!— Gritó Camila y Chris le ofreció la mano. Jenn y Zac los siguieron, Mary y Steve salieron por bebidas mientras que José siguió sentado como yo.

—Andy vamos a bailar— me rogó Sussan varias veces hasta convencerme y vi que José hizo lo mismo con Natalie.

Bailamos cerca, todos se divertían. Después de 2 canciones el Dj decidió poner salsa.

—Joséé— gritó Sussan ante la multitud soltando mi mano— ¡tú eres mi pareja de salsa!
Vi como prácticamente arrebató a José de las manos de Natalie y empezaron a bailar.

Natalie se dio la vuelta y caminó pero agarré su mano y la apreté contra mi pecho.

— ¿Bailas?— pregunté refiriéndome a la salsa y ella asintió.

Empezamos a movernos y bien que lo hacía, mi mano estaba en su cintura y la otra en su mano, giraba y se movía muy bien, como si sintiera la música.
La tenía tan cerca que sentía su dulce perfume, sus movimientos eran suaves, no decía nada, solo nuestros ojos y nuestros pasos.

—Bailas bien "Andy"— gritó acercándose a mi oído. El apodo me causó risa.

—Tampoco lo haces mal— respondí.

—Creo que es el efecto del vodka— sonrió.
Cuando terminó la canción me pidió un descanso y se sentó junto a Camila.

—Creo que esas dos ya han tenido bastante alcohol— dijo Chris a mi lado.

—Deberías de llevarlas a casa— dije.

— ¿Desde cuándo tan preocupado?— No me preocupaba, en absoluto.

— ¿Estás demente? Lo digo porque son tus nuevas hijas— Nos reímos.

—Pensándolo bien deberíamos irnos, mañana tenemos trabajo.

Nos acercamos a las chicas y Chris les dijo para llevarlas.

— ¡Tú no te vas!— escuché a Sussan a mi lado— Es hora de divertirnos— observé a Natalie y ella me miró pero siguió a la salida— Vamos arriba— jugueteó con mi cuello.

Maldita seductora.

Le hice señas a Chris de que me quedaría un rato más.

EN UN VIAJE #PNovelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora