One-Shots.-. [Stucky]

Dolor.

Le dolía, demasiado. No tenia palabras para explicar su sufrimiento, pero al ver sus ojos irritados por las lágrimas, sabia que no estaba pasando por un buen momento.

Ya no podía seguir sin el.

Día noche, su único pensamiento era el y solo el, dueño de su corazon, razón de sus lágrimas y tristeza. Por un momento creyó estar flotando en medio de un mal sueño, pero se dio cuenta de que no lo era al leer de nuevo su nombre en la placa del cementerio, donde él y mas personas ahora descasaban.

Era su aire su razón de ser.

Steve Grant Rogers.

Se arrodillo frente a su tumba tomando tierra entre sus manos y el césped este se estremecía al sentir tenues lágrimas caer sobre el.

Tomo las rosas blancas y las cambio por las ya marchitas, destapo el vino y lo sirvió en una copa.

-A tu salud amor mio.-

Tomo un pequeño sorbo, inhalando profundamente el embriagante olor a vino.

Y desde que se fue, ya no le quedan ganas de vivir.

Una mano temblorosa, saco de su bolsillo un frasco de pastillas, tomo 20 o incluso mas, no lo sabia, tampoco le interesaba.

Las metió todas a su boca, tomando mas vino para poder tragarlas.

-A salud de ellos amor mio.-

Miro todas las tumbas a su alrededor.

-Hoy Natasha fue a casa.- Tomo un cigarrillo entre sus dedos y lo encendió.- Me dijo debería dejar de fumar tanto .-ríe.- También me dijo lo de siempre "Todo estará bien".

-Ya me canse de oír eso ¿Sabes? De ver como todos siguen con sus vidas y yo aquí esperando a que las malditas pastillas hagan efecto.-

Ya no quiere sonreír, simplemente se quiere rendir.

Tiro la colilla del cigarrillo y sirvió un poco mas de vino.

-A salud de nosotros amor mio.-

Brindo bebiendo del vino, ya le costaba pensar claramente, la cabeza le dolía y sudaba frió.

Llorar y llorar, solo una vez mas.

Moriría lo sabia esa era su idea por fin poderlo ver una vez mas, si tan solo hubiera una razón por la cual quedarse, ¿la había? No. Para el quizás dos o tres personas llorarían por el y después de unos días lo olvidarían, lo borrarían, como si jamas hubiese existido.

Steve...

No merecía vivir, el debió haber muerto no Steve, un alma bondadosa, llena de carisma que siempre estaba lista para ayudar a quien lo necesitara.

Simplemente dejar de respirar

Lloro, se desahogo una vez mas no podía seguir viviendo no sin el, era una razón estúpida, pero el era su todo sin el era lo que es ahora, nada, nadie solo un ser que causa lastima.

Cerrar los ojos y no despertar nunca mas.

Sirvió mas vino.

-A salud de los felices, amor mio.

La vista se le nublo y después cayo desplomado sobre el césped. Todo había acabado, al fin.

Un alma que solo quería morir.

Su ultimo pensamiento, fue el, podía morir tranquilo sabiendo que después de tanto tiempo...

Lo volvería a ver.