No me conoces.

16. Libre Al Fin

Eloy.

Una vez en casa de Nathan logramos, localizar el numero que me mando el mensaje así como el de Sam y el raquel.

-Vamos están cerca de las montañas - tomamos las armas y
Salimos de su casa y nos fuimos lo más rápido que pudimos hacia la dirección del localizador cada  quien iba en su auto.
Llegamos al lugar donde se localizo el teléfono y no había muchos guardas, rodeamos el lugar con sigilo y encontramos una puerta trasera.
Nos adentramos y entre los pasillos escuchamos los gritos de quien parecía ser raquel.

-No suéltame, a ella no le hagan nada.

-escuchaste - dijo Nathan.

-Si es raquel.

Nos asomamos al otro pasillo y ahí iba ella tomada de los brazos por uno de los hombres de  Jacob. Se comenzaron a alegar por el pasillo y se escuchó el cerrar de una puerta.

-vamos, a raquel se la llevaron por allá, Sam debe estar cerca

Nos adentramos al lugar, y los gritos de Sam se escuchaban, mi rabia creció.

-Nathan, es Sam voy a buscarla ve por raquel.

Nos separamos y fuimos en diferentes direcciones.
Me acerque a una puerta y no se escuchaba nada, me acerque a otra y nada, una más y se escuchaba a Sam.

-No por favor. - decía ella.

-Muy tarde muñeca - es era la voz de Jacob.

No lo pensé más y entre a la habitación, mi corazón se destrozo en mil pedazos y la rabia y el. Odio crecían dentro de mi.
Jacob tenia a Sam boca abajo, completamente desnuda y el tenía su asqueroso miembro a punto  de entrar en ella, a grandes zancadas me acerque a el y los tome por la playera haciendo que cayera hacia atrás , escuche que sam me hablaba pero yo hacia caso omiso el odio me  tenía segado, llego Nathan y me alejo de el, mire a Sam y ella estaba desnuda sentada en el colchón, con sus ojos llorosos. Me acerque  a ella y con mi chamarra la cubrí la tome en brazos y salimos de ese maldito  lugar.

Sam.

Si el no hubiese llegado a tiempo mi vida no sería la misma, ese maldito me habría hecho lo que su gana se le diera.
Durante el camino ambos íbamos callados y era horrible ir así, se que el se siente culpable por lo que paso.

-Eloy - dije y el no volteaba a verme - por favor hazme caso.

-perdoname Sam no me ido perdonar que les aya sucedido esto.

-pero estoy bien, estamos bien y estoy aquí contigo.

-Sam, esto no puede seguir así.

-Eloy, ya que lo dije nada va a pasarme no mientras este contigo.

-No Sam,  si te quedas conmigo  algo te sucederá.

-y que! Mírame soy libre Al Fin y estoy contigo no hay nada mejor en la vida.

-Sam - dijo y me tomo la mano - gracias por estar conmigo.

-Nada hay que agradecer,yo te ayudo y tu me ayudas así de simple.

Seguimos nuestro camino y llegamos a su casa y nos fuimos directamente a sí habitación.

-tiene hambre - dijo mientras se quitaba la camisa.

-Si y mucha.

Volteo a verme y se quedó como hipnotizado, al darse cuenta que dejaba caer su chamarra de mi cuerpo, me miró con ojos de deseo y de una manera que no se como explicar.

-Eres bellísima - dijo y se fue acercando a mi - No se que haría sin ti sam.

Cuando trato de agarrarme, recordé a Jacob y la manera en que me tenia, me hice hacia atrás por inercia y el bajo su mano con decepción.

-Lo... Lo siento... No debí.

-No perdoname tu a mi, no debí reaccionar de esa manera.

-es mi culpa.

-No lo es.

-claro que si, mira te - dijo y señaló mi cuerpo desnudo.
-como te dejo ese hijo de puta y todo por mi culpa. - dijo y dio un golpe en seco a la pared

-No eloy, basta te haces daño a ti mismo - dije y lo abrace por la espalda.

El tacto de si piel con mi piel era exquisito, era una sensación inexplicable, es como si, estuviéramos destinados a estar uno pegado al otro.

-No Sam, todo esto es mu culpa.

-cállate no arruines el momento - dije y lo tomé con fuerza.

-te quiero eloy y eso nada ni nadie lo va a cambiar.

El tono mis manos y he hizo que lo abrazara más fuerte.

-nunca me dejes Sam, no lo soportaría.

-y tu a mi eloy - dije y el se giro a verme a los ojos - jurame que nunca me vas a dejar.

-te lo juro Sam.

Nos abrazamos fuertemente, mi cuerpo estaba completamente desnudo y sus brazos cubriendo de el, me siento libre estando a su lado, puedo ser yo estando con  el, ahora que lo pienso, estoy enamorada de el, no sería lo mismo si el se alejara de mi.

-Vamos, creo que necesitas un baño - dijo haciéndome sonreír.

Nos separamos y me tomo de la mano, llevándome hacia el baño.
Tomamos una ducha juntos y decidimos bajar a comer

-te parece si pedimos pizza - dijo eloy mientras bajábamos las escaleras tomados de la mano.

-mmm si me parece bien, pero hawaiana.

-mmm no, será mexicana.

-eh no - dije y lo mire feo.

-Sam sabes que a mi no me puedes intimidar.

Voltee los ojos y le hice un puchero.

-vamos amor que sea hawaiana.

-bien será de las dos.

Asentí y el fue a llamar a la pizzeria mientras yo buscaba que tomar ya que en el refrigerador solo había cerveza. No tenía muchas opciones, tome dos y el entro a la cocina.

-veo que también tomarás una - dijo destapando ambas cervezas - No sabia eso de ti

-Hay muchas cosas que no sabes de mi cariño - dije y le guiñe.

En ese momento tocaron el timbre  y eloy decidió salir por la pizza ya que decía que no quería que fuera yo por que el pizzero coquetería conmigo.

Eloy.

Tocaron a la puerta y salí yo a esperar la pizza, al abrir la puerta no había nadie, solamente un sobre amarillo en el suelo, lo tomé y lo abrí.
Una foto de Sam salio del sobre, así como una donde algo yo junto con ella y una nota.

Te estamos vigilando, cuida tus pasos James, no sabes cuando tropezaras con nosotros de nuevo.

Me quedé helado no puedo creer que sean ellos de nuevo, si se suponía que yo me vine de Australia para que me perdieran el rastro, ahora que voy a hacer Sam corre mucho peligro a mi lado