J.E/ Cartas a un costado.

Capitulo 14

─Hiro-san –suspiró un médico que se encontraba en el sofá. Sostenía una cuerda en la mano y la miraba con detenimiento─. ¿Podrías perdonarme si te dijera lo que quiero hacer?

El perro Hiro llegó a su lado, ladrando con alegría. Rasgó con sus patas y de un brinco logró subir al sofá. El hombre lo acarició con nostalgia, dejando que se echara a un lado.

─Debo ir buscando alguien que cuide de ti, pequeño Hiro –dijo al ver su tamaño─. Después de todo, no te puedo dejar solo aquí.

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-Flasback-

─¿Cómo es posible? ─dijo un hombre rubio, al mismo tiempo que llevaba una camilla.

─El estaba en el edificio de al lado señor, un restaurante. El hospital de esa zona se encontraba saturado, tuvieron que trasladarlo de emergencia ─respondió una doctora que lo ayudaba.

─Ya veo, está... muy herido ─comentó al ver las quemaduras de su rostro, y los golpes que traía.

Ambos doctores llevaron al hombre en la camilla hasta cruzarse con otro personal; ahí pusieron la camilla y dejaron que los demás se hiciesen cargo.
Pero Tsumori no se quedó tranquilo, no luego de haber visto quien era el hombre al que transportaba hace unos segundos. Recordó cuando lo llamaron para llevar la camilla al quirófano, estando tranquilo al principio pero llenándose de pánico al descubrir la identidad de aquella persona.
La doctora a su lado vio la expresión en su rostro, por lo que decidió preguntar─: ¿Tsumori-san?

─¿Eh? Perdón, ¿qué sucede? ─dijo saliendo de sus pensamientos.

─¿Conocía al hombre de la camilla?

─Sí, es un conocido ─respondió frío─ Pero es la pareja de Nowaki.

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─¡Nowaki! ─gritó Tsumori al abrir la puerta de un consultorio. El mencionado apareció con velocidad, preocupado por la expresión de su senpai.

─¿Senpai? ¿Qué sucedió? ─preguntó presintiendo algo malo.

─El paciente que trasladaron de emergencia... Es Hiroki.

El joven pediatra se congeló, reflexionando las palabras que había dicho.
─Senpai, no diga tonterías. Hiro-san está en una conferencia... en una universidad al otro lado de Tokyo. No puede...

─El edificio de al lado era un restaurante ─explicó con rapidez─, no sé cómo, pero Hiroki se encontraba ahí. Fue afectado por las llamas y lo llevaron al hospital. Pero en esa zona el hospital se saturó de pacientes, así que...

─¡¿Dónde está él?! ─interrumpió sin querer creerlo─. ¡Tsumori, por favor llévame hasta donde está!

El rubio suspiró.
─Sígueme.

......

Tsumori llevó a Nowaki hasta las sala de emergencias, donde a ninguno se le permitió el paso; tuvieron que conformarse con observar desde el cristal.
La mirada de Nowaki estaba devastada, pues a través del vidrio observaba con dolor como los médicos trabajaban para salvar a Hiroki. No quería imaginar cómo lucía, pues sabía perfectamente que las personas quemadas sufren desfiguraciones y graves heridas...

Pero no iba a pensar en el físico, lo más importante en ese momento era que su amante se recuperase.