"¿AMOR O DINERO?" (EunHae)

Capítulo 21: Otra vez.

- Hyuk ¿estás bien? *llevaba haciendo la misma pregunta cada dos minutos y a pesar de que el siempre me respondía con lo mismo yo no le creía*

- No pasa nada estoy bien *trató de sonreír pero sólo una mueca apareció en sus labios*

- Ok *tomé la vajilla de la mesa y me dispuse a ponerme de pié cuando siento su agarre*

- Hae... Lo siento no quiero que te enojes conmigo

- Entonces dime qué pasa porqué después de que tu celular sonará tú te pusiste como un papel

- Es algo malo, sólo puedo decirte aquello

- Valla gracias por la confianza *me solté de su agarre y dejé la vajilla en el fregadero*

Al terminar de lavarla sequé mis manos y salí de la cocina echando humo.

¿No puede confiar en mí ni siquiera por lo que compartimos ayer en la noche?
Sentí la respiración pesarme, no de nuevo por favor aquella sensación la había olvidado por completo.

Subiendo las gradas me dispuse a no pensar en lo sucedido iría a visitar a mis padres y talvez pase la tarde ahí.
Tomando una chaqueta y la billetera bajé nuevamente avisando a Jane que saldría.

No ví a Eunhyuk y por un lado me sentí tranquilo pero por otro me dolió el echo de que no halla ido a buscarme.

Tomé un taxi y dándole la dirección al señor fuimos primero a comprar lo necesario y después nos dirigimos hasta el cementerio.

Como siempre y cada que llegaba un nudo se formó en mi garganta al ver sus fotos en la lápida, traté de sonreír por ellos y por mí mismo.
Me había prometido recordarlos con una sonrisa y eso haria.

Pasé la tarde con ellos poniéndoles al tanto todo lo sucedido.
Una vez limpio su lugar de descanso hice una reverencia y besé sobre sus lápidas para después salir.

Decidí caminar de regreso a casa sentía una presión en mi pecho que me decía que algo no iba bien.

"Suposiciones mías", pensé

Mientras más caminaba más dolor sentía en mi pecho pero todo fué olvidado cuando un olor a galletas llegó a mi nariz.

- Mmm delicioso

Me dirigí hasta aquel lugar encontrándome así un pequeño puesto de café, entre y ordené las galletas junto con un batido de vainilla.

Cada bocado lo disfruté con una sonrisa, hace mucho que no comía cosas dulces que ya casi olvidaba su sabor.

Al momento de terminar me dirigía a caja para pagar pero su voz me detuvo.

- Vé tranquilo hijo *me giré y encontré a un señor que me brindaba una sonrisa que trajo paz a mi interior*

- Pero tengo que pagar

- Ya has echo mucho al entrar *poniéndose de pie y acercándose hasta mí para acariciar mis cabellos continuó* - Eres nuestro primer cliente desde que abrimos

- Su primer cliente de éste día

- Nuestro primer cliente desde que inauguramos.

Eso me tomó por sorpresa ¿Hace cuánto tiempo está aquí éste lugar?.

Alcé la mirada y él aún continuaba con su sonrisa.... Esperen esa sonrisa ya la había visto antes pero ¿en donde?.

Moviendo la cabeza de un lado a otro tratando de aclarar mis ideas me separé un poco.

- Por favor déjeme pagar por lo que eh comprado ¿sí?

- Si ese es tú deseo haslo

Caminando de prisa hasta la caja registradora saqué mi billetera y dejé una cantidad de dinero sin siquiera ver de cuánto se tratara.

Luego con una reverencia me despedí de aquel hombre y salí de ahí.

Al llegar nuevamente a la carretera me dí cuenta que el café se encontraba escondido entre una mata de árboles así que sin importar el tiempo fuí hasta una papelería compre cartón, unas tijeras, hilo y marcadores de colores.

Escribí en el cartón el nombre del local y lo pinté, con las tijeras le dí forma e hice huecos en sus esquinas para insertar el hijo y colgarlo entre los árboles.

Al terminar mi obra de arte sonreí más tranquilo, aquel señor me inspiró confianza y con ésto le devuelvo el favor.

"Café, Manos Mágicas"

Sin siquiera saber el porqué saqué mi celular y miré la hora.

19:30 pm.

Oh por Dios me eh pasado toda la tarde fuera de casa y aún me encuentro lejos de ella.

Por la carretera no pasaba ni un sólo auto, camine alrededor de dos horas sin parar.

Estaba por rendirme cuando veo luces, un auto dirigiéndose a mí.

Esperé a que llegara y crucé los dedos para que parara.

Se acercó y sin siquiera hacer nada se detuvo en frente de mi.
La puerta del conductor se abrió y yo pegué un salto del susto.

Hubiese querido correr pero cuando reaccioné ya me tenían agarrado del brazo.

- ¿Porqué nunca estás cuando llego? Siempre tengo que salir a buscarte

Aún impactado por todo lo sucedido me eché a llorar en su pecho.

- Lo siento.... Lamento no estar en casa cada que regresas.

- ¿Está todo bien?

- Perfectamente

Con sus dedos limpió mis lágrimas y tomó mi mano para dejarme en el asiento del copiloto.

Una vez dentro me sentí más calmado.

- Gracias por venir Siwon

- ¿Que sería de tí sin mí?

Los dos reímos, era verdad Siwon siempre me salvaba de las peores situaciones en las que me encontraba.
Aún no entiendo ¿porqué no me enamoré de él?.
Girando la cabeza hasta donde encontraba lo miré atentamente.

Tenía una sonrisa en su rostro, sus ojos a pesar de no estar mirándome brillaban con la luz de las lámparas.

Siwon es perfecto y creo que ya entiendo la razón del porque no puedo estar con él.

Él es una persona amable, carioñosa y bondadosa no necesita que yo lo cambie. En cambio Eunhyuk es lo contrario de él y yo me siento comprometido en cambiarlo aunque sé que es difícil al final lo lograré.

El transcurso de regreso a casa fué tranquilo nl necesitábamos hablar, la música de la radio acompañaba el ambiente.

Al llegar ayudé a Siwon con las maletas, le dí las buenas noches y me dirigí hasta la habitación.

Sin siquiera prestar atención a la cama fuí directamente al baño para cepillar mis dientes y lavar mi cara, me coloqué la pijama y salí.

No había rastro de Eunhyuk en ningún lado.

Me recosté en la cama dispuesto a esperar pasé más de hora y media despierto y cuando supuse que no llegaría me acomodé de lado tomando su almohada y abrazándola.

"No me hagas ésto de nuevo, por favor"

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Listo!!, Capítulo doble para uds
Gracias por decirme que es lo que quieren de la historia 😊