Cartas secretas para Eren Jaeger

Quinta Carta

Querido Eren

¡Estúpido Mocoso!

Por un momento pensé ¡¿Qué hice para que me hicieras esto?!

Ayer en la noche te vi hablando normalmente con Jean, pensé que no te llevabas bien con él por lo que se me hizo extraño y me quedé a mirar por si pasaba algo como la otra vez. Él te miraba con ojos de encanto como si fueras la personas más hermosa del mundo, que en realidad lo eres pero solo yo te puedo ver así, lo cual me enfadó bastante.
Caminé con bastante enojo hacia la dirección en la que ambos se encontraban, ese cara de caballo te tomó de la chaqueta y te besó sin previo aviso.

Mis ojos no podían creer lo que veían, mi cerebro no procesaba lo que estaba ocurriendo, o más bien, no quería hacerlo.
Sentí que mi corazón se detuvo, traté de retener aquellas lagrimas que amenazaban con salir pero fallé en el intento y comenzaron a caer de mis ojos pasando por mis mejillas. En ese instante tenia una mezcla de emociones entre ira, confusión, tristeza y quien sabe cuantas más.

MI Mocoso besando al estúpido cara de caballo.

En un momento de impulsividad caminé hasta allí mientras secaba mis lagrimas y le di un puñetazo a Jean en el rostro, consecuente a esto te soltó y notaste que me encontraba a tu lado. No te di tiempo para hablar y preferí irme rápidamente de aquel lugar  mientras las lagrimas amenazaban con volver a salir.

No pensé que me seguirías, sin embargo, lo hiciste. Lograste alcanzarme después de correr un poco, me tomaste del brazo e hiciste que me diera vuelta bruscamente.

Sentí tus delicadas manos abrazarme, tus labios besar mi frente mientras escuchaba tus palabras.

—No es lo que cree capitán, si lo vio desde un inicio pudo notar que Jean fue quien se me abalanzó encima y me besó —dijo con la voz entrecortada por haber corrido.

Yo intenté safarme suavemente de tu abrazo ya que no quería lastimarte pero lo único que conseguí es que me apretaras aún más fuerte.

—Capitán Levi, yo lo amo ¡A USTED! —hiciste una breve pausa.

—Por eso es el único al que me entregué en cuerpo y alma, usted me llevó a las nubes, me hizo sentir en el paraíso, ahora tengo más en cuenta que me ama como a nadie —sentí como temblaba mientras hablaba.

—Usted será el único que me tendrá, hasta la muerte, lo amo más que a nadie Capitán y quiero cumplir mi sueño a su lado.

Con aquellas palabras todo lo sucedido se esfumó rápidamente de mi cabeza, comprendí que estaba cegado por mis celos.

Eren, jamás borraré esas palabras de mi mente, eres sólo mío.

Att: Levi Ackerman