¿El experimento del cambio...?

1.6K 201 8
                                    


El silencio reinaba la sala de la casa de los Bernoulli, el antes rubio no se atrevía a decir nada por miedo a muchas cosas y el castaño solo esperaba paciente a que este hablara de una vez, no debía ser tan malo el secreto detrás del cabello cambiante de McQueen, además, estaba comenzando a pensar que el color negro hacia resaltar aun más su blanca piel y sus ojos azules

-Bien... no puedo quedarme callado para siempre-susurro Rayo suspirando, junto sus manos y agachó un poco la cabeza- Todo fue culpa de un experimento

-¿Que clase de experimento?

-A eso voy...-contestó dejando escapar otro suspiro- Según èl, mis padres estuvieron haciéndome experimentos raros desde que nací lo cual me dejo con varios... "Problemitas mentales de baja intensidad"

Y el cabello negro es... *suspiro* Es porque Chick quiso continuar con esos experimentos, yo no me daba cuenta, cuando hacía la comida èl ponía drogas o pastillas para que me durmiera. Así fue como durante medio año, cuando tuve un pequeño accidente en un entrenamiento para probar nuevas ruedas... me quede dormido de la nada y CASI chocó, cuando fui al doctor este hizo los exámenes y lo pregunto

-¿Usted consume drogas o alguna pastilla en particular?

Obviamente le respondí que no, eso sería humillante para mi, era un corredor profesional y si salía el rumor de que utilizaba drogas aun si era una figura famosa provocaría el caos. Cuando llegue a casa me lo encontre alli, poniendo una extraña sustancia brillosa en mis galletas, chocolates ¡En todo lo que comía y era mio! Le grite y le pregunte que como se le ocurre hacer esas cosas...

-¿Por que, dices? Anda, asi que no sabías que tus padres te utilizaban como conejillo de indias, yo solo continuo con el trabajo del señor y la señora McQueen-respondio sonriendo- ¿No quieres volver a ver a tus padres? Entonces sabes que debes obedecerme...

Cuando terminó de hablar, sentí un gran dolor en mi cabeza, llegue a caer al suelo con unas cuantas lágrimas en mis ojos por el dolor que extrañamente sentía alli arriba, tosí un poco y al notar mi mano alli habia sangre. Mire hacia arriba y la sonrisa que me dirigía Chick era... era una difícil de describir, me dio miedo, sentía ganas de salir corriendo de una maldita vez... fue alli cuando un mechon de mi cabello cayó en mi frente y casi grito del susto ¡Era negro en vez de rubio!

-¿¡Q-Qué mierda has hecho!?-grite poniéndome de pie buscando con la mirada el maldito espejo del living.

Siempre me gusto el color de mi cabello, pues a pesar de ser rubio muchos me decían que era más parecido a un dorado, un color difícil de encontrar... pero no, ¡Ese maldito lo dejo negro! Y mis ojos fueron hasta  mi frente, había un extraño rayo de color verde opaco

-Mierda, y tus ojos siguen igual-comento Hicks detras de mi, cunado me voltee lance el espejo al suelo

Le exigí saber que mierda se supone que trataba de hacerme, le grite que con mi cabello no se juega y que quería hacer con mis ojos. Explico detalladamente y con calma, que el experimento iba sobre cambiar el aspecto humano y la reacción del cuerpo al recibir las toxinas, también me dijo que fui afortunado de seguir con vida en la primera parte del experimento... la segunda iba de cambiar el color de mis ojos a un color extravagante o extraño pero para poder continuar debíamos esperar un tiempo. Yo acepté someterme a cualquier cosa, con tal de que me dijera quienes eran mis padres y donde estaban...

Francesco se quedó en silencio, no sabía cómo debía continuar ahora hasta que escucho al pelinegro suspirar. Le miro y este le dedicó una gran sonrisa

-Si Mate no hubiera metido la pata, y yo no hubiera venido, quizás en estos momentos estaría muerto- dijo riendo levemente y se levantó del sillón- Cuando mi cabello volviera a estar asi, era la señal de que debíamos continuar... mientras el no lo sepa, todo estará bien

-¿"Esta bien", dices? McQueen, es capaz de matarte... ¿Y tú seguirás sin hacer nada?-pregunto levantándose mientras el ojiazul  buscaba algo en su bolso  y al encontrarlo se lo mostró al castaño- ¿Que mierda es eso?

-Francesco todo estará bien, tú no necesitas preocuparte de nada y sobre esto... es lo que necesito para que mi cabello vuelva a ser normal...

El italiano quedó mirando atentamente el pequeño frasco entre sus manos, el liquido que habia dentro brillaba y los colores que mostraba eran de tonos morados y azules, era realmente lindo. Aun estaba pensando acerca de la historia contada por el americano, dejó el frasco entre las manos de este y le beso la frente con cariño, le susurro que fuera a ducharse y a arreglar su cabello antes de que llegara su madre de las compras. McQueen le dio un suave beso en los labios y le susurro un leve "gracias por todo, Bernoulli" y se separó camino al baño del segundo piso dejando en el primero a un sonrojado castaño que solo atino a cubrir su rostro con sus manos,  debía pensar ahora como mantener mas tiempo al "rubio", hasta que pudiera avisarle a alguien o algo para que Rayito estuviera a salvo. Cuando la madre del corredor de F1 llego, McQueen ya estaba con su cabello rubio y estaba leyendo los mensajes que le enviaban Sally y Chick

-¿Donde está Francesco?- pregunto dejando las bolsas sobre la mesa

-Esta duchandose-respondio sacando de las bolsas unas galletas- ¿Puedo?

-Lo que quieras, bambino~

Agradeció sonriendo levemente y con el paquete de galletas en mano fue hacia el sofá sacando el móvil para tratar de buscar alguna noticia sobre Chick encontrándose con algo que le hizo temblar. "La reacción de Chick Hicks al enterarse de que su prometido lo pateó mundialmente por Francesco Bernoulli" no supo el porqué, pero una sonrisa creció en sus labios al ver aquella noticia...

Pero el miedo hacia el otro corredor estadounidense era mayor y seguia alli, tenia que disfrutar esos pequeños grandes momentos con Francesco. Esos momentos que se llevaría hasta la muerte...

Una Aventura Sobre "Ferrari" {...}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora