Fénix: El Inició Del Sueño

Capitulo 7: Un último adiós

Cuando la luz que aquél rayo azul  que iluminaba el cielo fue disminuyendo poco a poco junto con la esfera que destruyó todo a su paso, se pudo ver por fin a Kevin desmayado que caía al suelo de una gran altura pues cuando aquella figura se elevó a los cielos él se encontraba dentro de ella. Azef y Rhoi también se encontraban inconsciente por el golpe que ambos habían recibido al golpearse contra aquellos árboles así que no podían ayudar a Kevin que caía a una gran velocidad y si golpeaba contra el suelo era imposible que no muriera.

Se oyó a lo lejos que alguien había arrojado una especie de tela que se dirigía hacia Kevin. En menos de 5 segundos una esponjosa y suave tela de color dorada se había formado debajo de Kevin deteniendo la caía del chico contra el suelo. Unos instantes después de que el niño aterrizará en esa tela está se volvió a encoger quedando del tamaño de la mano.

Un hombre se fue acercando poco a poco hacía donde Kevin y cuanto más se acercaba más iba notando como el cuerpo de Kevin se encontraba muy lastimado y con quemaduras, así que se inclinó y empezó a curarlo con un aura de color blanco que desprendían sus manos.

- Espero estar aún a tiempo- dijo preocupado al ver que sus heridas sanaban muy lento.

Momentos después parecía que por fin Kevin se empezaba a recuperar pues se estremecía mucho y eso era una señal de que pronto recobraría la consciencia. Dicho y hecho no tardo demasiado para que Kevin empezara a reaccionar.

-¿Que pasa?- pregunto el muchacho confundido y a dolorido.

-Vaya pensé que no la contarías - dijo aliviado el hombre que estaba curando a Kevin.

-¡¿Quien es usted?! - dijo alterado Kevin al ver a ese hombre mientras se alejaba arrastrándose para atrás.

-Me llamo Guruk, pero puedes llamarme Guruk es un gusto - dijo él echándose una sonrisa
Kevin aún seguía asustado al verlo.

-No te asustes no soy de los malos , todo lo contrario te estaba ayudando- dijo él
Kevin empezó a observarlo bien y vio que era un hombre cuarentón pero no estaba tan maltratado por los años, por lo que se dejaba ver tenía un pelo de color negro con blanco pero no se apreciaba bien del todo pues la capucha que llevaba encima no dejaba verlo con total claridad, también se observaba que el color de sus ojos eran de un tono peculiar pues eran de una mezcla de azul, amarillo y verde.

-¿Que haces aquí? - le preguntó Kevin a Guruk más calmado.

-Pues me perdí en el camino y se hizo de noche entonces decidí acampar, pero de un momento a otro oía explosiones cerca de dónde me encontraba- explicó Guruk mientras veía el horizonte dónde el sol empezaba a bañar con sus rayos de luz la tierra-. Entonces decidí acercarme un poco para averiguar un poco lo que estaba ocurriendo pero sólo sentía como una poderosa onda hacía que retrocediera cada vez más, entonces supe que lo que estaba ocurriendo delante mío era grande y poderoso así que cuando se calmó la onda expansiva salí rápidamente para averiguar que pasaba y di podía ayudar en algo y pues henos aquí no - dijo mientras volteaba haber a Kevin con una sonrisa.

"Así que fue eso, aunque debo admitir que este tipo no me da mala espina también debo decir que es un poco raro" pensó Kevin unos segundos. Justo en ese momento recordó a Rhoi

-¿Oye no has visto por aquí también a un niño de cabello rojo?- preguntó preocupado Kevin pensando que algo le había ocurrido.

-Pues no lo creó aunque con tanta luz que había dudo mucho que igualmente pudiera haber visto algo - respondió Guruk pensativo mientras con su dedo tocaba su mentón.

-Debo ir a buscarlo - dijo Kevin mientras trataba de levantarse pero el dolor que aún sentía no se lo permitió

-No tan rápido niño, sabes tus heridas no han sanado aún necesitan algo de tiempo para sanar completamente- dijo teniendo y calmando a Kevin