-¡Mira , es Minghao! - me di la vuelta rápidamente ante el grito de Seungkwan.
Mala idea.
No había nadie.
-Wow, ¿te gusta mucho? - preguntó.
-¿Tú qué crees? - respondí rodando los ojos antes de darme la vuelta y caminar al salón de clases.
-¿Y por qué no se lo dices? Ustedes son buenos amigos.-
-Exacto, somos amigos. Solo eso soy para él.-
-¿Cómo lo sabes?-
-Es obvio.-
-Pues... haz algo para que le gustes.- detuve mi paso y lo miré mal. No es como que no lo haya intentado, pero es algo incómodo al verlo.
-¿Como qué? -
-Dale comida - sonrió.
-¿Es enserio? -
-Oye, dar comida es la mejor prueba de amor en el mundo. No cualquiera se merece tu comida. ¿Cierto Minghao? - abrí los ojos sorprendido al ver como el mencionado se acercaba.
-¿Qué es cierto? -
-La comida es la mejor prueba de amor ¿verdadero o falso?-
-Verdadero - respondió con su tierna sonrisa, la cual rápidamente se me contagió. -Ya me tengo que ir, adiós chicos.- agité mi mano sin dejar de sonreír.
-Necesito comida -