Muertos para el mundo - Atrapada en ti #2

Capítulo I

You're not her

Though I try to see you differently

I tow the line

You see, I'm searching for what used to be mine

I saw your eyes

And then I saw Alice staring back at me

And I will try to find another one

Who suited me as well as her

-Ed Sheeran

La luz del sol se aleja rápidamente tras el ocaso, dejando a su paso una latente oscuridad y un frío que cala hasta los huesos, pronto mi ligero suéter azul marino es inútil contra la helada noche en el bosque. Me froto los brazos con las manos en un intento de obtener un poco más de calor, pero sé que es hora de regresar a la cabaña, no tiene sentido quedarme sola a la mitad de la nada. Éste ha sido otro día perdido.

Aprovechando la escasa iluminación que queda, trastabillo entre la maleza y los árboles para poder llegar a la camioneta. Antes de perderla completamente de vista, giro una última vez y observo la grieta casi invisible por la hierba, como esperando un milagro de último minuto. Aunque sé que nada va a suceder, lo sigo anhelando, deseándolo igual que todos los días. No sé cuánto tiempo me quedo mirándola fijamente hasta que mi estómago gruñe y me trae de vuelta a la realidad. Hace horas que no pruebo bocado y probablemente Chris empieza a preocuparse.

Ésta ha sido mi rutina de cada día durante el último mes: me despierto antes del amanecer, manejo hasta la parte del bosque donde lo perdí y me quedo esperándolo hasta el anochecer; la única variante es cuando Chris, Oliver o Daniel deciden acompañarme, pero los días en que ellos vienen conmigo son cada vez más distantes. Pasar el día sola y en medio del bosque puede parecer deprimente y aburrido, pero al menos he logrado ponerme al corriente con los estudios y la lista de libros que debo de leer antes de volver a morir.

En cuanto llego al auto, saco el maltratado pedazo de papel que está a punto de desmoronarse y leo por millonésima vez las palabras que me vuelven a infundir esperanza después de un día infructífero como éste... como todos. Él va a regresar. Debe hacerlo. Lo prometió. Y yo estaré ahí esperando por él, igual que todos los días.

En el instante en que Oliver encontró la nota de Xavier, la decisión fue obvia para casi todos: si él iba a regresar, nosotros lo esperaríamos. Y así la cabaña donde terminó y comenzó todo se convirtió en nuestro hogar durante el verano, el lugar para esperar lo imposible.

Prendo el motor para subir la calefacción al máximo y el estéreo se enciende sólo. Una canción que no reconozco comienza a sonar y escucho atentamente la letra... la voz de la mujer me eriza la piel y conforme avanza la melodía siento las lágrimas que intentan escapar de mis ojos. El peso que he cargado desde que reviví, de repente se vuelve intolerable. Toda la culpa, el dolor, la tristeza y el miedo que intenté mantener bajo control durante todos estos meses, regresan como un monstruo hambriento que me desgarra desde adentro.

If I could face them

If I could make amends

With all my shadows

I'd bow my head

And welcome them

Cuando termina la canción me abalanzo sobre el reproductor y la pongo en repetición, las palabras me hacen daño, pero es un dolor que necesito. Han pasado tantas cosas, cosas inimaginables, imposibles, dolorosas...