Capítulo 12

493 19 0
                                    

— ¡Nina!— se sorprendió de verme— Te lo puedo explicar— comenzó.

— ¡No!— le detuve— No quiero que me expliques nada— me fui, pero el me siguió.

—Nina perdóname por favor, se que te dije que no haría nada, pero no pude evitarlo.

La gente nos estaba mirando, decidí que lo mejor era salir del Roller. Tomé a Gastón del brazo y le saque de allí para dirigirle a un parque cercano, una vez allí, le solté y me senté en el primer banco que vi, el se sentó a mi lado.

—Nina— comenzó el.

—Gastón, creí que confiabas en mí— dije por fin.

—Y lo hago, de verdad que lo hago— insistió.

—Definitivamente no lo haces, sino no habrías ido a buscar a Xabi— reproché— Te dije que lo tenía todo solucionado.

—Lo sé, pero tú no me querías contar nada de lo ocurrido por lo que tampoco confías en mí— no podía creer que estuviera intentando culparme.

—Perdona, pero la razón por la que no te conté nada fue porque sabía que actuarias así— me defendí— Además tú me lo prometiste.

—No puedes reprocharme que no confíe en ti cuando definitivamente no confiamos el uno en el otro— declaró.

—Entonces no hay nada que perdonar.

—Bien, dejemos esta discusión absurda y volvamos al Roller—se levantó, pero yo no— Te invito a algo.

—No Gastón— me miro— No hay nada que perdonar porque ya no hay nada entre nosotros— mire al suelo.

—Nina ¿Me estas dejando?— se volvió a sentar y me tomo de las manos— ¿Por qué?

—Tu mismo lo has dicho, no confiamos el uno en el otro, y una relación e basa en la confianza— le mire, mis ojos querían llorar, pero yo impedía que mis lágrimas— Gastón, tu siempre serás mi primer amor, pero nunca pensé que algo como esto podría ocurrir, y prefiero conservar tu amistad antes de que se salga de control.

—Lo entiendo, pero deberíamos pensarlo mejor antes de cometer una locura.

—No Gastón, no hay nada que pensar— separé mis manos de las suyas y me levanté— Adiós.

Me fui a casa, me sentía muy triste por haber terminado con Gastón, pero sabía que era lo mejor, si no había confianza no había nada. La verdad es que me enfadé conmigo misma al tirarlo todo por la borda la primera vez que teníamos problemas, pero para mí la confianza era lo más importante.

Recibí bastantes llamadas telefónicas de mí ahora ex novio, también me había llamado Luna quien seguramente nos vio a Gastón y a mí cuando salíamos del Roller. Apague el teléfono, no me apetecía hablar con nadie. Me fui temprano a dormir.

Al día siguiente, no me apetecía nada tener que ir a la escuela, no solo podía ver a Gastón, sino que también podía ver a Xabi. Llegue un poco más tarde lo normal, vi a Luna entrando al Blake.

—Luna— la llame cuando estábamos a poca distancia.

Las dos nos saludamos y le conté sobre mi ruptura con Gastón. Y mientras hablábamos sentí una mirada en mi, mire de reojo y vi a Gastón que entraba con Matteo, Mi amiga saludo a si novio de lejos dándole a entender que se verías más tarde, seguramente Matteo ya sabría de que Gastón y yo lo habíamos dejado. Luna me abrazo después de que yo terminara mi relato.

—Gracias, lo necesitaba— agradecí.

—Lo que necesites, para eso estas las amigas— me sonrió— Vayamos a clase, luego en el Roller te invito a algo.

Eso hicimos, en clase decidimos no comentar nada acerca de mi ruptura, ni siquiera Jim y Yam. Cuando terminaron las clases, decidimos quedar en un parque cercano al Roller, así si veía a Gastón o a Xabi no estaría sola. Y eso hicimos, pero Luna tenía que irse a entrenar por lo que cuando me dejo sola, Xabi se acerco a mí.

—Nina tengo que hablar contigo— me pidió sentándose enfrente.

—No Xabi, además, no me apetece hablar con nadie hoy— me justifiqué.

—Pero a mi si me apetece hablar contigo— sabía que seguiría insistiendo por lo que decidí aceptar.

—Bien, ¿De qué quieres hablar?

—De lo ocurrido ayer con Gastón— comenzó— Me siento muy culpable de vuestra pelea, si yo no te hubiera confesado mis sentimientos nada de esto habría ocurrido.

—No te sientas culpable, tu solo fuiste sincero y además aceptaste mi amistad, eso es algo que realmente valoro— el no había hecho nada malo, solo confeso algo que necesitaba sacar de su cabeza— La culpa es mía y de Gastón, si ambos tuviéramos confianza el uno en el otro no habríamos terminado nuestra relación.

—Espera, ¿Habéis terminado?— yo solo asentí— Entonces por fin puedo hacer esto.

Me beso.

Me beso y yo me quede petrificada, no me esperaba que me besara así de la nada. Sus manos acariciaban mis pómulos mientras que mis brazos aun estaban quietos sin saber qué hacer.

—Lo sabía— escuchamos una voz y cuando Xabi se separo de mi, vimos a Gastón.

Gastina: el amor no siempre es perfecto [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora