Capitulo 13

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Su cara se puso muy pálida. Muy diría yo. Pude notar que trago en seco. Su vista paso a Jae quien estaba en brazos de George. Se mantuvo observándolo. Creo que no estaba seguro que demonios hacer. Estaba en blanco o eso daba a entender. Mi niño lo miro y hasta yo sentí una extraña corriente. Sus ojos se unieron. Ninguno de los dos apartó la vista de cada uno. El
Señor Lee dio unos pasos hasta estar más cerca de George. Subió una mano lentamente, sin quitar la vista de Jae dudo si elevarla más o no. La mantuvo a una distancia prudente.

— Soy...

Se quedó callado. Y lo que pasó después fue tan emotivo que me dieron muchísimas ganas de llorar. Ver esa escena de mi Jae con HunJae. El que era tan idéntico a Ken. Fue horriblemente dolorosa. Mi niño levanto su manita y tomó la mano extendida que HunJae aún tenía en el aire. Lleve una mano a mi boca intentando a toda costa de no llorar. La vista de HunJae pasó a mí por un momento y luego se volvió a posar en Jae.

— ¡Tio! - la hermosa voz de Jae se escucho y lo que pasó luego me dejo de piedra.

Jae extendió sus brazos a él y él sin ninguna duda y sin vacilar lo agarro y lo pego a su pecho dándole un fuerte abrazo.

— Hola Principe... - murmuro casi inaudible.

Y el mundo se detuvo solo en ellos dos. Esa hermosa y cautivadora escena. Fue tan perfecta que todo el mundo dejo de girar. Solo quedó ese inexplicable encuentro entre ellos dos. A mi lado mi mejor amigo el que estaba igual de cautivado que yo. Jamás pensé que el Señor Lee fuera actuar así de esa forma tan amorosa como lo estaba haciendo justo ahora. No tenía palabras para explicar cómo me sentía ¿feliz? Definitivamente eso era lo que estaba. Feliz de que mi niño estuviera entre los brazos de la única persona más cercana a su padre. El hermano gemelo de su papá. Que tan bien mi niño se debe de sentir en este momento. De estar así de cerca y que su tío el cual al principio parecía distante lo tenga en brazos en este momento. Así como si su vida dependiera de ello. No se soltaron. Creo que fue una eternidad. Pero solo paso unos minutos hasta que se separaron de ese majestuoso y cariñoso abrazo. Solo un poco, lo suficiente para que el Señor Lee pudiera mirarlo a la cara. Mientras en su rostro tenía una encantadora sonrisa. Sus ojos brillaban de una forma inexplicable. Parecia feliz, ilusionado, entusiasmado... Jae lo observaba con una linda sonrisa de satisfacción... Mi niño definitivamente estaba feliz el parentesco que HunJae y su papá tenían era para el algo confuso. Por suerte el sabía que era su tío pero puedo apostar que el ahora en este momento lo estaba viendo como su padre no como su tío. Su carita era tan ilusionada tan feliz. Una gota de tristeza invadió mi pecho, el sueño de mi niño era estar así en los brazos de su papá. Nuevamente intentando de no sentirme culpable. Daría mi vida entera para volver a ese día y hacer algo al respecto. Algo para que mi bello Ken y Lori estuvieran con vida.

— Que hermoso momento... - susurro George cerca de mi oído. Yo solo ascendí con la cabeza. Sonriendo ante lo que estaba volviendo a pasar frente a mis ojos. Jae llevó sus manitas hacia las mejillas de HunJae y las colocó en ella.

— Tío...

— Dime... - contestó él viéndolo maravillado, fascinado, jamás había visto a un Tío poniéndose así por un sobrino. Era tanta la emoción.

— Te quelo...

Enredo sus bracitos por su cuello y lo volvió a abrazar. El señor Lee acepto su abrazo feliz mente.

Después de eso todo pasó a viento en popa. Bueno sin contar la escena que me monto Himchan. Si, así como lo oyen. Fue exactamente donde mi para pelearme de porque razón Jae estaba en los brazos de HunJae. Como si no supiera que él es su tío. Fue una discusión bastante sería. Tanto que George tuvo que intervenir. Eso causó que se largara de la mesa que todos íbamos a compartir. Luego de bello momento de mi hijo con su tío pasamos a sentarnos. Extrañamente el señor Lee estaba solo excepto por ese hombre que aveces estaba con el. Que había aparecido de la nada luego de que HunJae fuera un momento a tomar aire fresco.

Las modelos desfilaban por la pasarela con cada uno de los diseños que habíamos preparado. El más aclamado fue el traje de baño rojo y negro. Si ese mismo que el Señor Lee insistió tanto. Llamaba mucho la atención sino por la delicadeza que había sido preparado. Todo el era hermoso. Tango que personas de alto rango en este tema estaban interesados en el. Y no sólo en la prenda si no en la persona que lo había creado. Todo salió de maravilla, ahora quedaba la gran celebración. Era bastante tarde por lo que llame a Miri para que fuera recoger a mi pequeña Fresita. Jae casi no se anima a irse, ya saben quería estar más tiempo y no porque le agradará la celebración, si no para estar cerca de HunJae. Luego entendió que era muy tarde y que sus ojitos le andaban traicionado. El sueño lo estaba venciendo así que a regala dientes y con un puchero se dejó girar por Miro.

Ahora solo estaba tomando aire fresco en el balconcillo que daba una vista a la cuidad. El aire estaba un poco frío pero era soportable. Tenía una copa de champán en la mano mientras la escena de hace unas horas atrás invadía mi cabeza.

— Hola...

Gire mi cabeza por el pequeño susto que me había llevado. El señor Lee estaba parado a unos pasos de mi. También con una copa en la mano.

— Hola

Conteste volviendo mi vista a la enorme ciudad. Siento alumbrada con tantas luces. Casi sin dejar ver las estrellas.
Escuche sus pasos al acercarse y como se colocó a mi lado. Mirando exactamente a mí misma dirección.

— Así que soy...

Dejo la palabra en el aire. Yo solo Sonreí.

— ¿Tío? - dije yo bebiendo un sorbo de mi champán.

— Si, Tío...

— ¿Aún no te la crees? - reí

Suspiró

— Es algo confuso...

— ¿Qué? - lo mire. Él siguió mirando al frente.

— ¿Como pasó?

¿Ah? Como que como pasó?

— JaeHwan y yo estábamos saliendo. Más bien éramos pareja, algo serio. Pero por culpa de una persona todo salió mal.

— Por mi padre no?

— Si

— Entonces ese día... por eso Jae...

Me giro algo confundida. Porque no termina las palabras. ¿Qué pasa con el?

— ¿Jae?

— El Niño

— ¿Qué pasa con el?

— No, nada... - bebe de su copa yo lo observo confundida.

El silencio se vuelve presente.

— Puedo visitar a mi ni... Sobrino... - me mira.

— Claro es tu sobrino... Contesto arqueando una ceja. ¿Que iba a decir?

— Señor...

Nos giramos los dos al mismo tiempo. Era el chico que la
Mayor parte del tiempo estaba con el.

— ¿Que pasa?

— Christian quiere hablar contigo

HunJae solo hace un gesto con la cabeza. Se gira donde mi.

— Dele mis disculpas al señor Kim. Surgió un problema familiar debo irme. Gracias por decirme que tengo un...sobrino.

— No se preocupe. Debía de enterarse - le dedico una sonrisa. Él me mira de arriba a abajo. Sonríe y cuando sus ojos se conectan nuevamente con los míos, con una mirada traviesa. Me quedo estática luego de escuchar lo que dijo.

— Pareces una Barbie... - se gira sonriendo y sale del balcón dejándome como una estatua.

El Señor Lee (Ken y Tu) [Segunda parte de Mi Venganza]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora