Capitulo 35

19 3 5
                                    

MADISON

Las vacaciones mas eternas que había tenido jamas.

Los días pasaban con tanta parsimonia que comenzaba a sospechar de que el tiempo había organizado alguna especie de plan malévolo contra mi. Las horas parecían eternas, los minutos parecían horas y mi estado de ánimo se tornaba bipolar.
Podía estar completamente enfocada junto a las chicas, sonreír junto a Ashton pero al final del día, al volver a casa, abrir la puerta principal y encontrarme con la infinidad de trofeos de max, justo en ese momento, les juro que me sentía la persona mas infeliz del mundo.

Me parecía demasiado todo lo que había ocurrido en tan solo un mes. Mi hermano ya no estaba, jeff ziggler destronado de su imperio, brooke siendo "x"... ¿o debería decir Keysie?
Mi único deseo en estos instantes de la vida era huir muy lejos y olvidarme de absolutamente todo. Pero no podía hacerlo.

— No podemos hacerle tal barbaridad, no a ella.— sentenció becca. — tal vez Keysie esta loca pero brooke no.

— Son la misma persona, becca.— bonnie repuso — el mismo cuerpo, el mismo padre...

— Pero no la misma mente.— le interrumpí — brooke y keysie habitan el mismo cuerpo pero no comparten la misma calidad de pensamiento. Ciertamente, Keysie es más hábil y malvada.

— Entonces, ¿que haremos? — behati dio un buen sorbo al café que había pedido en la cafetería que nos encontrábamos. Justo esa donde una vez estuve con Ashton — no estoy de acuerdo con perjudicar a brooke, pero a la perra de Keysie no la soporto.

La mesa donde nos encontrábamos era la mas alejada de todas, esa ubicada en una esquina donde ni siquiera había una misera ventana cerca. El lugar no estaba repleto, incluso muchas otras mesas con mejor vista y condición estaban disponibles pero nosotras preferimos esta. La mas escondida. En eso se basaba nuestra vida últimamente, en estar atentas, encubiertas y a las sospechas de cualquiera que se nos acercara.

— Esto es tan bizarro.— becca soltó una risita irónica y dejó a un lado el tenedor con el que había estado dando bocados al trozo de pastel de chocolate frente a ella — estamos hablando de una sola persona pero a la vez no... ¿comprenden?

La verdad este tema si era algo muy fuera de lo común.

— Por supuesto. — dije — antes creí que esta parte de nuestras vidas quedaría enterrada en el pasado.

— Todas creíamos eso. Se suponía que brooke ya estaba curada.— vociferó behati — si tan solo su madre estuviera aquí... Ella sabría que hacer.

— Lo mas razonable a mi parecer — mencioné — es que pidamos ayuda a un profesional.

— O a google. — sugirió bonnie. Las otras tres la observamos curiosas; ¿era en serio? — no me miren así. No queremos perjudicar a brooke, ¿cierto? — asentimos — bueno pues, si vamos con un doctor o algo parecido eso es lo que va a pasar; la encerraran en un psiquiátrico por loca desquiciada.

— Cierto... — Murmuré.

— ¿Y como nos ayudará google?

— ¿Bromeas, becca? ¡La internet lo sabe todo! — inquirió behati — o bueno, casi todo.

— Exactamente.— bonnie apoyó a su hermana — Lo que se me ocurre es indagar en paginas de la web y leer sobre como podríamos lidear con alguien que posee el trastorno de personalidad que tiene brooke.

Frunci él ceño.

¿Seria esta la mejor opción?

— Tenemos que irnos.— súbitamente behati se levantó de su asiento algo alarmada, con el celular en una de sus manos — papá quiere vernos, leah. — indicó a bonnie — y según el mensaje, es con carácter de urgencia.

Dammit! | Ashton IrwinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora