How To Be A Beard

Un Lugar Con Tragos.

Capítulo 8

Un lugar con tragos.

Holly

Sábado 12 de abril 2014.

— ¿Porque hiciste eso?—Dije golpeado el brazo de mi amigo de pelo negro.

—Te hice un favor, estabas hipnotizada con el hombre, es bastante lindo —Dijo este codeándome.

—Odio que quiera hablar de chicos, no puedo hablar de chicos con un chico —Digo exasperándome y levantando la voz.

— ¡Riley!—Escuchó el grito del chico de ojos encantadores, avisado que la orden esta lista.

— ¡Riley!—Digo empujando la espalda de Paul animándole a ir en busca de las hamburguesas.

—Oh no, vaya a buscar las hamburguesas y coquetee como es debido con el atractivo chico al que claramente le gustaste—Dice levantándose para luego jalar mis manos y palmear mi espalda al estar ya levantada, siendo el ahora el que me animaba a buscar nuestra orden.

Siento que camino como si fuera bambú en el camino desde la saliente hasta el carrito, donde un sonriente chico de ojos verdes me tiende la bolsa de papel.

—Mi nombre es Skylar, por cierto —Dice guiñando un ojo y entregando unas cuantas servilletas de papel.

—Holly—Mi voz sale casi ahogada, definitivamente no soy buena hablando con chicos lindos.

—Esperare tu llamada Holly—Dijo este despidiéndose antes de volver a atender clientes.

—Creo que se me ha quitado el hambre—Dije cayendo sentada junto a Paul y entregando a este la bolsa mientras mi mirada se dirigía al carrito naranja de comida.

—Ni tú te crees eso Holly—Dijo Paul tomando su hamburguesa y luego la mía para ponerla entre mis manos y hacer como si chocáramos copas pero con los emparedados de carne.

Y entre mordidas devastadoras para la pobre hamburguesa y miradas que deshacen a la pobre yo.

Y casi pude olvidar todo lo que había hablado hoy con el pelinegro. Casi.

***

25 de abril 2014

— ¡Estoy tan emocionada! — Dije sosteniéndose de los hombros de un desgarbado Paul.

Si bien el chico ya no se estaba arrastrando como hace pocos días, seguía sin estar completamente bien, díganme loca, pero estar encerrado en su habitación no le ayudaría, haberlo obligado a ir a las grabaciones había sido la mejor decisión. Si, seguro que sí.

—No entiendo porque estas tan emocionada, ya has estado antes en un estudio de grabación, ya conoces a los chicos, no hay nada nuevo que ver— Dijo este con una sonrisa floja en su boca.

— ¡Hay una nueva canción!—Digo dándole ánimos al chico entre brincos a su alrededor, esperando todo mi entusiasmo.

La usual Holly.

— No tan nueva —Dijo este con la cara larga manteniendo el paso hasta que llegamos a una puerta gris de un material que lo pude tantear pues el de los ojos claros ya la había abierto.

Fuimos recibidos, más bien Paul, con abrazos y sonrisas, vagas preguntas acerca de Brett y el por parte de los chicos y solo un asentimiento desde su asiento por parte de Elizabeth.

Esa chica era demasiado tranquila.

Finalmente pudo conocer a la famosa Dinah Jones, la hermosa e imponente novia de Garrett, tal para cual, la chica era despampanante, su cabello gris recientemente teñido llamaba mucho la atención para un color que en general era tan discreto, y probablemente sería bastante baja sin los tacones que calculaba podían llegar a más de 15 centímetros. Sus ojos eran del color del ámbar, almendrados y llenos de vida, todo lo contrario a Elizabeth, cuyos ojos cafés de centraban en el espeso libro en sus manos, solo ocasionalmente dando un repaso a la habitación, cabeceando hacia Mickey cuando quería decir a este algo.