Capitulo 11° Segundo plato

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Kira de repente había desaparecido. Pensaba que se quedaría, pero más que me he distraído ella se ha ido.

-Lily ¿Por qué me temes?-La pregunto volviendo a lo mío
-La ley dice que...
-Lo sé-La corto-Pero a mí me da igual esa ley-Contesto con una sonrisa-Pueden comérsela con patatas porque yo paso de ella

Lily me mira con una dulce sonrisa, era una chica encantadora.

-Por favor déjame ayudarte, déjame ayudar a todo el reino-La pido
-¿Y qué quieres que haga?-Pregunta interesada
-Ahora sino te importa ayudarme a buscar a Kira y cuando estemos con ella os lo explico a las dos-La contesto
-¿Puedo confiar en ti?-Pregunta con un hilito de voz y algo nerviosa
-Por supuesto, te lo prometo-Respondo-Kira lo ha hecho y no la he hecho nada...aun-Me empiezo a reír, pero al ver que Lily se lo toma enserio paro y se lo intento aclarar-Lo siento, solo era una broma-Sonrió

Salimos de la habitación en busca de la petarda de Kira. ¿Y ahora que estaba haciendo esta chica? Se oyeron las trompetas, y con ella los demás instrumentos que acompañaban la melodía inicial para avisar que iba a comenzar la ceremonia. En mi cabeza apareció la idea de saber dónde estaba Kira. Corrí lo más deprisa posible al balcón, mi familia ya estaba en sus posiciones, y como era de esperar Sefora estaba en mi sitio. Como no me sorprendió no hice mucho caso, mi hermana me vio pero giro la cabeza de inmediato mirando al frente sin decir ni una palabra, y ya cuando se giró mi madre y me vio fue cuando me mando colocarme en el otro lado de mi hermana, y así ella estaría en el centro y se notaría quien es la protagonista de hoy.

Mi hermana ni si quiera me miraba, la que si me miraba mucho era su queridísima amiguísima hasta la muerte Sefora. ¡Que harta me tenía esa chica! ¿Por qué no dejaba de mirarme? Todo el rato mirándome, que pesada. La melodía de la entrada comenzó, yo buscaba a Lily desde mi sitio haciendo ejercicios de cuello. Al fin la vi llegar, la hice un gesto esperando que lo comprendiera. Pero por desgracia ella empezó a hacer gestos aún más raros que los míos y acabo haciendo un extraño baile de manos y pies al estilo gallina.

-¿Qué haces?-La susurro aguantando la risa

Mi familia y Sefora me miran, sonrió y ellos siguen a lo suyo.
¡Esto era ridículo!

-Sus majestades el rey y la reina de Lumineit

Mis padres empiezan a andar, yo no paro de mirar hacia Lily, ella me hace un gesto extraño. Empiezo a caminar, pero alguien me para, giro la cabeza para el otro lado y veo la cara furiosa de mi hermana delante de mis narices.

-¿Se puede saber qué haces?-Me pregunta-Sé que estas cabreada, pero ese no es motivo para arruinarme mi fiesta
-Hace unas horas te quejabas de ella y esperabas que no se celebrase-Respondo
-Tu hermana ha cambiado de parecer-Se mete Sefora
-Exacto, soy persona y tengo derecho a cambiar de opinión-Continua mi hermana
-¿Entonces tú tienes derecho pero los demás no?-Preguntó
-No he dicho eso-Dice
-Si, antes cuando me has dicho que no ibas a ayudar a la gente con distintos poderes-La recuerdo
-No es lo mismo-Intenta buscar salida
-¿Y por qué no?-Pregunto para hacerla ver la realidad
-Tu hermana es de la familia real, y va a ser reina, más derechos va a tener claramente-Se vuelve a meter Sefora haciéndome explotar
-Oye Sefora, cielo ¡cállate!-La suelto ya algo nerviosa
-No la hables así-Me regaña mi hermana
-¿La defiendes a ella?-Pregunto sorprendida
-Belle nadie te ha obligado a asistir, comprenderé que decidas quedarte en tu habitación-Dice mi hermana
-No me lo puedo creer, no...
-¡Lo comprenderé!-Me insiste
-Está bien, yo si se saber cuándo sobró o cuando me quieren en un sitio-Digo mirando a Sefora

Me acerco a Lily ante la atenta mirada de mi hermana y Sefora.

-Vámonos-La digo
-¿No vas a quedarte?-Pregunta
-Me han sustituido, no hace falta que yo este-Intento sonreír aunque me sentía dolida por dentro
-¿Qué pasa con Kiara?-Pregunta refiriéndose a Kira
-Tendremos que apañárnoslas para buscarla, Kiara puede estar por cualquier sitio del palacio-Respondo aguantando la risa

Pensaba llamar Kiara a Kira siempre que pudiera, a menos que le pareciera bien, si fuera así no lo haría. No tendría gracia.

-No puedo creer que después de cómo te trata tu hermana vayas a hacer esto-Dice Lily
-¿Cómo lo sabes?-Pregunto sorprendida
-El discurso de tu padre está a punto de acabar-Se escabulle

No digo nada, solo escucho porque parte iba mi padre, me sabia los discursos se todos de memoria, el de mi madre siempre terminaba con ella llorando. Mi padre estaba muy contento porque decía que si veían que la reina tenia afecto durarían un año más, pero mi madre lloraba de verdad.

Era cierto iba a terminar ya y a decir sus últimas palabras del discurso "Y aquí está mi preciosa hija, la que de seguro será la mejor reina de todo Lumineit. ¡Mi hija Kattnis!" después de eso se oiría una melodía e imagino aplausos de fondo, y mi hermana saldría, se suponía que conmigo, de la mano, juntas, como hermanas, como compañeras, como siempre. Aunque ahora lo hará con Sefora.

-De todo Lumineit. ¡Mi preciosa y querida hija Kattnis!-Termina mi padre, y acto seguido tal como estaba planeado sonó la música y como no todos se pusieron a aplaudir.

Mi hermana le dijo algo a Sefora, ella le contesto otra cosa, luego se dieron la mano y con una sonrisa salieron al balcón. No voy a fingir más, me había dolido, pero eso no quitaba que fuera mi hermana y que tenía que quererla ante todo. Era la hora de actuar, antes de que lo hiciera Kira.

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