Heroes diferente

Capitulo 8°: La hija de la noche

-Lo que te quería decir es que...

-Tenemos que irnos-Nos interrumpe Sefora entrando a toda prisa y llevándose a mi hermana.

Mientras se van Sefora se da la vuelta y me mira con la mala cara. Yo me quedo en su cuarto, sentada en la cama, pensando. Estaba claro que a esa chica le pasaba algo conmigo e iba a descubrir el que y el porqué.

-¿Qué te pasa?-Oigo a alguien decir

Veo a una chica entrar, me fijo en su pelo de varios colores y todos llamativos.

-¿Quién eres?-Pregunto extrañada
-¡Alguien!-Contesta sonriente sentándose a mi lado
-Ya estamos, no os podéis colaros en el palacio sin permiso-Digo algo cabreada
-¡Eh! tranquila menos nervios-Dice sin ponerse nerviosa, ni cabrearse-Yo tengo permiso
-¿Ah sí?-Pregunto sorprendida
-Si, aquí mismo-Sonríe enseñándome un papel firmado por mi padre-Bueno...¿Y qué te pasa?-Me vuelve a preguntar
-Perdona, es que todo lo que tenía planeado está saliendo mal, todo es un desastre-Me disculpo llevándome las manos a la cara
-Si algo es oscuro no significa que ya sea feo, simplemente tienes que verle su belleza interior y brillara especialmente para ti, que lo sabré yo bien que tengo poderes oscuros-Dice ella
-¿No tienes miedo de decirlo?-Pregunto más que asombrada por su contestación
-¿Por qué he de acobardarme de algo que me gusta de mí? Me gusta ser distinta-Dice alegre

Me gustaba esta chica y su optimismo. Parecía buena compañía. Me sentía fatal por mi conversación con mi hermana, o simplemente por el día de hoy, yo nunca soy como me estoy mostrando, nunca me fijo en el aspecto, trato a todos como iguales y quiero ayudar a todo el que pueda, pero hoy lo nervios están jugándome una mala pasada.

-Soy Belle-Me presento
-Cordelia-Me da la mano
-¿A qué te dedicas Cordelia?-Pregunto sonriente y más calmada para saber más de ella
-Soy domadora de dragones, los cuido y protejo y me paso la vida con ellos, les doy de comer, les lavo y estoy ahí para lo que necesiten ¿y tú?-Pregunta guiñándome un ojo
-Si puede contar, soy princesa, un cargo muy difícil y aburrido que no me va a servir para nada, en un año cuando mi hermana sea coronada reina, yo inmediatamente dejare de ser princesa y seré conocida como la hermana de la reina, o ni eso-Contesto
-¿Te llevas bien con tu hermana?-Me pregunta
-Si, siempre hemos estado muy unidas, cada una tiene sus ideas, ella quiere ser una famosa estrella, una triple amenaza, cantante, actriz y bailarina, quiere recorrer mundo y hacerse famosa por su talento, yo en cambio quiero ayudar a la gente, comprenderla, hacer del mundo uno mejor donde todos vivimos en armonía y felices y para eso necesito ser reina, decidimos intercambiar los papeles pero nuestro padre nos lo prohibió, aunque no sé por qué-Explico -¿Y tú? ¿Qué tal con tu familia?-Pregunto
-Mi familia son los dragones, ya te he dicho que son mi vida, me he criado con ellos-Dice
-¿Y tus verdaderos padres?-Pregunto
-Son los dragones y punto-Contesta seria y algo molesta
-Vale, perdona-Me vuelvo a disculpar por segunda vez
-Ah, tranquila, no pasa nada-Me perdona de nuevo, y alegre como al principio
-¿Eres bipolar?-Me atreví a preguntar
-No que yo sepa, aunque no me importaría-Ríe
-Me alegro de haberte conocido Cordelia-Sonrió
-Eso dicen todos al principio-Dice riendo y me guiña un ojo-Me has caído bien, te imaginaba de otra manera-Dice
-Gracias-Le agradezco -Eres la primera que me lo dice en el día de hoy-Rio con ella
-¿Acaso te has levantado hoy con el pie izquierdo?-Dice sonriente
-Puede decirse que si-Digo
-Para animarte te voy a hacer el truco de las estrellas

Cordelia se levanta cierra la puerta y empieza a hacer estrellas, estrellas brillantes y preciosas, de colores, que flotaban por la habitación.

-¡Que chulada!-Digo fascinada
-Coge una y ponte la en el pelo ¡Cambiara de color!-Me asegura
-¿Enserio?-Pregunto
-Sí, hazlo-Sonríe-La prueba es mi pelo-Dice riendo
-¿Dónde has aprendido a hacer esto?-Pregunto
-Prefiero no hablar de eso-Dice
-Está bien-Contesto para no molestarla de nuevo