EL DULCE SABOR DE TUS LABIOS

LA VERDAD SEA DICHA

Esta historia es escrita Cómo entretenimiento y sin fines de lucro

Los personajes son creados por la escritora Kyōko Mizuki, uno de los seudónimos de Keiko Nagita, y la mangaka Yumiko Igarashi, seudónimo de Yumiko Fijii, publicado en Japón por Kodanshahs Ltd. desde 1975 a 1979

Después......... Meses después William, mi amado hermano y tú madre ya no estaba con nosotros, La mujer se volteó y las lágrimas brotaban de sus ojos cansados y tristes por remover tan dolorosos recuerdos

- Tía ya no quiere más secretos en nuestras familia ¿Cómo es posible que usted permitiera que ella creciera sintiendo una extraña dentro de su propia familia?

- No digas eso Albert, ella siempre se sintió a gusto con nosotros, nunca hice diferencia entre ustedes siempre, los cuide y los quince por igual, la mujer lloraba a mares, los recuerdo de esos días se agolparon en su memoria y no podía contener el llanto

- Tia, tía me parece increíble lo poco que la conoces, cuando prácticamente eres su madre, las palabras del joven eran agridulce para la mujer, ciertamente la quería cómo a una hija al igual que a su madre

- Mi niño lamento que pasara todo esto, este destino tan doloroso que por generaciones nos a perseguido, tantas muertes repentinas, tantos accidente inimaginables que generación tras generación han ido acabando con los miembros de nuestra familia, ¡ahora miramos! Sólo quedamos tu y yo

La mujer se llevó las manos al rostro, le daba dolor pensar que si algo les pasaba a alguno de ellos dos el otro quedaría completamente sólo, el joven se encontraba en un dilema, si contarle la verdad o guardar silencio

El silencio era pesado dentro de esas cuatro paredes, en ese momento los rayos del sol estaba filtrándose por la venta y él se llenó de esperanza, en otra habitación estaba su familia, esos dos niño que no sólo representaban tantas cosas, la continuidad de su apellido y su linaje, el amor tan grande que sentía por Carol y su vida, esta tres personas representaba enteramente su vida misma

- Tía, tranquilizante por favor, siempre debemos tener fe en Dios y esperanza en el mañana

- Mi niño perdona el haber guardado este secreto, Elroy tomaba la mano del muchacho parmesano, sonriendo levemente

- Tía necesito que hables con Oswaldo, trata de contestar lo que el te conteste, no omitas ningún detalle y trata de hacer memoria, trata de recordar que decía eso documentos que firmaste

Elroy suspiró con pesar y se dirigió a una silla, en algún lugar debe estar una copia hijo pero no puedo, no logró recordar haberlas visto, no recuerdo que tu padre los guardará, no estaban en el banco ni en la caja fuente

- Tenga Calma tía no se atormente, todas las dudas que tenía sobre su tía, se disiparon al verla en ese estado

Algunas horas más tarde llegaba Oswaldo a ver a Albert como lo hacia a diario desde que lo visitará por primera vez meses atrás,  el nombre ya estaba frustrado tantos meses y ni una sola pistas, quién quiera que estuviera detrás de aquel atentado, se había cubierto muy bien sus espaldas y no dejar ningún rastro

Toc toc toc la puerta de la habitación en donde se encontraba Albert

- Adelante, se escuchó una de voz femenina por lo que el Oficial se puso alerta, antes de abrir

- ¿Sra.  Elroy cómo se encuentra? El hombre estaba entre asombrado y molesto, desde el día en que nacieran los gemelos y tuvieron aquél altercado ni siquiera se había cruzado

- Buenas joven, Elroy también se mostró incómoda ante le presencia de ese joven impertinente que se había atrevido a correrla de La Clínica el día que Carol murió, los dos se miraban con desconfianza