Sweet [◤TaeJin◥]

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— Hyung, ¿qué es eso?

Él pequeño minino estaba observando fijamente a Jin, quien se estaba haciendo el último nudo de su corbata.

— Es una corbata, sirve para verte más... Elegante.

TaeHyung solo se limitó a asentir y mostrar su sonrisa ante la respuesta de su mayor.

— Bien, es hora de irme, vulevo pronto, ¿si? Te cuidas.

Dejando un corto beso en la cabellera peli-roja de Tae se fue del lugar.

TaeHyung se quedó pensando, ¿y si era más elegante para su Hyung?

Sólo era ponerse un traje y un simple pedazo de tela alrededor de su cuello, no sería tan difícil.

(...)

— Así no se hace...

Susurraba para si mismo mirándose en el espejo, tenía toda la corbata revuelta y el saco puesto al revés.

Quizás no fue buena idea.

— Esto no le agradará a Hyung...

Se mordió su dedo observando todo el desorden en su habitación, ropa regada en todos lados.

— Ups.

El sonido del picaporte de la puerta principal resonó en toda la cada cual eco y Tae se alarmó.

— ¡Ya llegué!

Oh no...

(...)

TaeHyung mantenía su cabeza gacha mientras recibía el sermón de Jin, este no había tomado en cuenta el detalle que le quería hacer el minino y eso sólo le dolía más.

— Perdón.

Jin suspiro frustrado.

— Esta bien, sólo no lo vuelvas a hacer.

Con un portazo se fue del cuarto dejando al menor soltar las lágrimas retenidas por mucho tiempo, la había cagado, otra vez.

(...)

T

aeHyung ya tenía rato que había dejado de llorar, sabía que con sólo hacer eso no ganaba nada. Pero en realidad se sentía mal.

No fue hasta ena noche que se quedo dormido que Jin fue a verlo en la habitación de huéspedes.

Lo miraba con cierta tristeza esparcida por sus ojos marrones.

A paso lento y siendo extremadamente cuidadoso se acercó a la cama donde Tae dormida y con cuidado se sentó.

— Lo siento pequeño.

Empezó a dejar leves caricias en el pelo del minino.

— No quería que llorarás.

Si, en efecto. Lo había escuchado y eso le hacía sentir mala persona.

—Pero debes aprender lo que esta bien o esta mal.

— Aprecio mucho lo que has echo por mi, sin ti, estaría completamente solo.

Jin se acercó a la cara de Tae y dejó un corto pero delicado beso en su mejilla, la cual tomó color a los pocos segundos.

— Me encantan tus mejillas sonrosadas.

Soltando una leve risa salió del lugar.

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No tengo ideas,
I'm sorry por el
cap tan caquis.