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En los pensamientos de Yano solo estaba aquel chico de pelo castaño con el que ya se había topado en mas de una ocasión. El chico tenía algo que a Yano le gustaba, pero aún no lograba deducir qué era.

—¿pero cómo es posible?.— replicaba JiHo aun y otra vez.— todos sabemos lo mucho que Hansol odia los hospitales—

—se los dije, ¿no?.— Yano se encontraba igual de sorprendido que los demás chicos.

—¿por qué no quiere volver?.— Jenissi estaba volviendo a las lágrimas.

Xero rápidamente corrió a sacarlas y luego darle un cálido abrazo.

—No lo entiendo Xero, realmente no lo entiendo.— decía entre sollozos.

—Bien. Yo no me quedaré aquí de brazos cruzados esperando por una respuesta, mañana mismo voy a volver allá a hablar con él.— dijo un decidido Yano.

—Yo iré contigo.— dijo JiHo aún con Jenissi en sus brazos.

—¿Jenissi?.— Yano miró al chico empapado en lágrimas.

—C-Creo que prefiero quedarme aquí.— dijo con la voz entrecortada.

Ambos chicos lo comprendieron, Taeyang era bastante sensible con estos temas.

Los 3 chicos se fueron caminando hasta la casa que compartían Jenissi y Xero.

—¿y cómo lo convenceremos de que vuelva?.— preguntó Xero sentándose en el sillón junto a Jenissi.

—Eso aun no lo sé, primero tenemos que sabes qué es lo que lo hace quedarse.— dijo Yano con una mano en su barbilla.

Lo primero que llegó a la mente de Yano fue el enfermero que no se quería despegar de él, el mismo enfermero que los espió cuando fueron a visitar a Hansol, ese chico no le quitaba la mirada de encima, como si de un tesoro se tratase.

Debe ser él, estoy seguro.

Habitación 56 [HanJoo] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora