Want it (Jikook)

XVIII.

Fue encendiendo de una forma un poco torpe todas las luces que se encontraba por su camino, no quería soltarse del chico. Nunca. Besaba sus suaves labios con agresividad, ambos respiraban con dificultad ya que cuando podían, lo hacían por la boca y esta, en la gran mayoría de casos, se encontraba ocupada. 

Al principio las lenguas entraban en la boca del otro tímidamente pero a medida que fue pasando el tiempo y notaban el calor por todo su cuerpo, avanzaban aún más. En otra situación no les habría gustado pero en aquel momento no les importaba, es más, querían más y más. Muchísimo más. Querían besarse en cada rincón del cuerpo, marcar su cuello, pecho, caderas, piernas... absolutamente todo. La excitación aumentaba y poco a poco sentían como su ropa les empezaba a oprimir poco a poco. Necesitaban quitársela cuanto antes. 

Jimin seguía encendiendo las luces, quería ver perfectamente el cuerpo desnudo de Jungkook, como siempre. No dejaría ni un rincón de la casa oscuro. A trompicones, llegaron a la habitación del mayor. Era amplia y estaba bastante despejada. Una cama a la derecha, una mesa al lado de esta y una gran alfombra en el suelo. En frente de la cama se encontraba un gran espejo y un pequeño sofá. Jimin tampoco tenia muchas pertenecías por lo que en una esquina de la sala instaló un pequeño armario donde guardaba su ropa y libros. 

Cuando cruzaron la puerta, la ropa comenzó a caer al suelo y los labios comenzaban a llenar con besos la piel desnuda que había quedado al descubierto. En tan sólo 2 minutos se quedaron completamente desnudos y jadeantes, Jimin se sentó en el borde de la cama y atrajo la cabeza de Jungkook a su entrepierna. El chico entendió perfectamente su "tarea" y comenzó a lamer y a absorber. Jimin, mientras, apretaba con fuerza las sábanas y el pelo del chico y movía sus caderas al mismo ritmo de la boca de Jungkook. Ese chico hacía sus deberes bastante bien, conseguía hacerle gritar de placer en muy poco tiempo; aprendió muy rápido que mientras se la chupaba, para una mayor eficacia, podía masturbarse a la vez, eso excitaba aún más a Jimin.

Jimin, que se conocía bastante bien, a él y a su amiguito, cuando vió que iba a correrse de un momento a otro, subió a la cama a Jungkook y comenzó a estimularlo. Sacó de la cómoda que estaba a un lado de la cama, un par de geles, que en estos casos eran más efectivos que la saliva e introdujo progresivamente sus dedos en el trasero de Jungkook. Cuando el moreno se acostumbró a ellos y dió el visto bueno, Jimin introdujo su miembro y comenzó con sus embestidas. Aquello si que les hizo sudar. Jungkook apretaba su mandíbula con fuerza y Jimin jadeaba con la mirada hacia el espejo. Aquella imagen... Jungkook agarrado en los bordes de la cama mientras dejaba que Jimin jugueteara con una de sus manos en toda la zona de su ingle a la vez que le penetraba con fuerza... era muy excitante. Jungkook lo era de por si y ese hombre estaba en aquel momento en su cama. Todo su cuerpo le pertenecía.

Ambos estaban llegando a su limite, lo podían sentir. Sus caderas se movían con más fuerza y sus espaldas se arqueaban cada vez más. Los cosquilleos aumentaban e incluso dejaban de escuchar al otro. Su cuerpo estaba a punto de explotar. Por un momento su vista se nubló y todo su cuerpo se erizó y tembló. Sin fuerzas, ambos se tumbaron en la cama sin aliento y las caricias dulces comenzaron.

- Siento no haber podido hacer esto contigo antes. - Susurró Jungkook.

- No te preocupes.

- Ha sido la semana más larga de mi vida.

- La mía también. - Llevó una de sus manos a la nuca del chico y le besó delicadamente. - ¿Quieres pasarte a la ducha? - Preguntó juguetón levantando una ceja mientras tiraba de él hacia el baño.

- ¡Hyung!

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Necesito escribir lemons más largos xD

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