CAPÍTULO 6

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CAMILA

Llegue a la escuela de los niños, que no estaba lejos del departamento y nos fuimos al café donde trabaja Lauren. Llegamos y vimos que estaba colgando el delantal pues se estaba acabando su turno. Los niños gritaron su nombre y corrieron a abrazarla. Ella los recibió con un abrazo cálido y sincero, lo que me hizo que me diera un pequeño vuelco al corazón pues ellos ya la apreciaban.

C: Hola Lauren, espero que no te hayamos importunado. Vengo a invitarte a cenar con nosotros.

L: Hola Sra. Cabello, buenas tardes – y me ofrece nuevamente su mano en forma de saludo y la tomo, lo que hace que vuelva la corriente eléctrica por mis manos hasta mis pies. – desgraciadamente no puedo acompañarlos hoy, tengo un compromiso previo y voy saliendo para allá. Pero gracias por la oferta.

M: Podrás cuidarnos hoy también Lauren?

S: ¿No oíste que está ocupada? ¿Eres sordo?

L: Sandy cariño, no es forma de contestarle a tu hermano, tal vez no entendió todo, verdad Matt? – *Dios, hasta la forma de corregirlos es tierna, ¿Será real esta chica?*

M: No había entendido, lo siento

C: No lo sientas mi vida, no pasa nada. – Acaricio la cabeza de Matty y volteo a ver a Lauren, ella está abrazando a Sandy y le daba pequeños besos en la cabeza, Matt estaba agarrado a su mano y se balanceaba, parecían muy cómodos alrededor de ella, eso me llenó de ternura y de algo más que no sabría descifrar por el momento. Confundida decidí romper con el momento y dije – Bueno Lauren la verdad es que la cena era para agradecerte que hayas llevado a los niños a la escuela y que me hayas cuidado a mí también, no tenías por qué hacerlo. Además no te he pagado, así que por favor toma este dinero y espero que me puedas apoyar en otra ocasión con estos pequeños niños traviesos. Sandy y Matty voltearon a verse con complicidad y posteriormente a mí con una sonrisa y al unísono dijeron ¡Sí!

Extendí la mano con el dinero, ella hizo unamueca de no querer tomarlo y yo jalé su mano y la puse en ella. Me quedé mástiempo del necesario tomando su mano hasta que ella carraspeó y se hizo paraatrás soltando mi agarre. Me dio las gracias y se despidió de los niños conbesos y abrazos prometiéndoles que pronto los vería. Me hizo una seña dedespedida y salió del local dejándome confusa ante lo que estaba sintiendo consu contacto, ante lo que aquel cuadro habría parecido. Salimos del café y nosfuimos a cenar al departamento.    

Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora