Suspiré — Creo que lo mejor sería que lo dejara.
— Pero solo faltan tres días.
Fruncí el ceño. Era verdad, el concurso era este sábado. No quedaba casi nada. Ya hasta había comprado la ropa que iba a usar — Ya lo sé, pero no puedo seguir bailando con él sabiendo todo lo que dijo.
— Bueno, ya te sabes bien los pasos ¿No? — Preguntó empezando a caminar por su sala, se detuvo y me miró. Asentí — Entonces ya no es necesario que sigas ensayando con él, solo espera hasta el sábado, baila "con él y listo. Al menos habrás cumplido.
Verónica tenía razón.
Solo tenía que esperar hasta el sábado. Bailar y listo.
Fue difícil sin embargo, le mandé un mensaje el jueves a Camerón diciéndole que tenía que estudiar para un examen importante y que no me quedaría a ensayar y el pareció entenderlo.
Pero al día siguiente cuando inventé otra excusa poco convincente, me interceptó en la salida del colegio preguntando si había algo mal y Dios sabe que no soy una persona agresiva, pero sentí tantas ganas de abofetearlo que tuve que agarrar mi bolso con fuerza para evitar que mi puño se estampara en su mandíbula.
¿Qué me había gustado de él de todas formas?
¿Era su cabello con reflejos rubios? ¿Su nariz perfecta? ¿Sus ojos claros?
Ahora me daba cuenta de que nada de eso importaba. El podía ser hermoso por fuera, pero eso no garantizaba que lo fuera por dentro.
Solo fue un enamoramiento estúpido. Está todo bien, solo no me estoy sintiendo muy bien en estos momentos — Era verdad. Estar tan cerca de él en realidad me hacía sentir mal. Todas las cosas que había dicho sobre mi bailaban alrededor de mi cabeza y solo quería empujarlo para luego correr lejos.
— ¿Quieres que te acompañe a tu casa?
—Gracias por tu gran amabilidad — Anuncio Verónica tomando mi brazo y salvándome de responder — Pero yo la voy a acompañar.
Camerón frunció el ceño. ¿Hay algún problema con eso? Verónica se paró frente a él elevando sus cejas.
Él le sonrio ampliamente como si estuviera jugando con ella — No, claro que no. No hay ningún problema.
— Bien — Verónica tiró de su pelo hacia atrás de su hombro casi golpeando la cara de Cameron y luego tomó de mi brazo para que nos fuéramos.
Más tarde ese día Camerón me llamó para saber si ya me sentía bien porque quería que nos juntáramos una última vez para dejar todo listo y acordar bien lo que íbamos a hacer, ya que mañana era la presentación, pero Verónica interceptó mi celular y le dijo que yo necesitaba descansar y le colgó cuando él empezó a discutir.
Estábamos en mi habitación viendo el DVD de High School Musical 3 — Por segunda vez ese día — y ambas estábamos sentadas en la alfombra, apoyadas en un montón de cojines.
Sin embargo, ella había estado más tiempo con su celular del que había visto la película. Sus dedos se movían con agilidad y precisión sobre el teclado de su celular tan rápido que estaba empezando a marearme.¿Con quién estas hablando tanto?
Le sonrió al celular y entonces rápidamente lo apagó y me miró dándome una sonrisa — Con Álvaro.
No sé por qué, pero no le creí.
La miré de reojo detenidamente estrechando mis ojos, pero solo me dio una mirada de— ¿Qué? Yo no hice nada. Que no me dejó para nada tranquila.
— ¿Podemos ver otra cosa? Ya he visto esta película un montón de veces. Me sé los pasos de memoria.
— ¿En serio? ¿Estas segura?
Si Le fruncí el ceño por estar tan entusiasmada, pero me ignoró Los repasamos con Shawn luego de que pude apoyar bien mi pie.— Genial.
— ¿Vas a explicarme ahora porque quieres que la vea?
— Um... — Ella fingió pensarlo — No.
— Bien — Suspiré.
Una vez que terminó y que le supliqué a Verónica que viéramos algo mas, ella empezó a cambiar de canales rápidamente y lo dejo en The Vampire Diaries.
Ah, no estoy de humor para ver eso. Elena me pone de los nervios.Verónica cambio de canal a una película — Si, a mi también.
— Me gusta cada vez más la idea de Damon Con Bonnie.
— ¡Siiii! ¡Vamos BAMON!
Nos reímos y chocamos las manos.
— Si no hubiera sido por Damon, ya habría dejado de verla hace rato.
— Si — Estuvo de acuerdo conmigo — Y Stefan.
Me di la vuelta para mirarla y elevé mis cejas — ¿Te gusta Stefan ahora? ¿Qué tiene? — Me miró con expresión soñadora — Es guapo y romántico. Si Elena no lo quiere entonces yo sí.
La empujé por el hombro y ella se rió. No sabía que habría hecho sin ella esta noche. Probablemente estaría entrando en un ataque de pánico por lo de mañana.
— ¿Quieres comer algo? Puedo hacer palomitas.
Gemí y toqué mi estomago — No gracias, mi estomago no estaría feliz con eso.
De hecho apenas y pude comer en todo el día. Mi estomago estaba
apretado y tuve ganas de vomitar casi todo el día.— ¿A qué hora dijiste que es la presentación?
Pensé en ello — Um, como a las 3. Pero somos los primeros así que tenemos que estar allí lo antes posible.
— Bien, llegaré antes de eso así puedo maquillarte y ayudarte a vestirte.
— No creo que...
— Sabes que tengo buen gusto. No voy a maquillarte como un mapache. Solo haré resaltar más tus ojos y listo. Está bien — Me relajé — Gracias.
— Cuando quieras. Para eso estamos las hermanas grandes.
Sonreí ¿Crees que es demasiado tarde para cambiarte por Matt?
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Me muero que pasara en la competencia chic@s espero que les allá gustado Síganme voten por la novela y comenten que tal les pareció Recuerden que tengo redes sociales. Instagram: Valeriagonzalezrosas
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Mi Maestro De Baile (Shawn Mendes y Tu )
Losowe"Bailar. Esa era la palabra clave. Parecía sencillo. Yo podía hacerlo. Solo que estaba bastante segura de que tenía dos pies izquierdos y si intentaba bailar con alguien probablemente lo pisaría sin piedad hasta la muerte. Pero era la única opción q...