Capitulo 3°

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Me desperté por el sonido de mi móvil era un Wpp de Rubius, en realidad eran 5.

''Holaaaa _____ como estas? :D''

''Estas despierta?''

''EEEEEH DESPIERTA BELLA DUERMIENTEEE''

''ACASO NO ME QUIERES? D:''

''vale dormilona te dejo que duermas tranquila :P''

Sonreí al leer los mensajes. Decidí contestarle.

''Ya estoy diespiertaaaa que querias? :)''

''saber como estabas dormilona :D''

''Hey! no soy dormilona, tengo el sueño pesado ¬¬''

''como digas dormilona te espero en mi casa dentro de dos horas vale?''

''pero no tengo tu direccion! xD''

Luego me llegó un mensaje de el diciéndome su direción.

''Está bien dento de dos horas estoy allí ''

''Te estaré esperando :)''

No contesté ya que tendría que prepararme para ir a la casa del Rubius, quien lo diría? Yo preparándome para ir a la casa de uno de mis ídolos, ni yo me lo ceía. Fuí hacia la cocina a comer algo ya que estaba muerta de hambre.

—Buenos días hija, como has dormido?

—Bueno días papá, bien y tu?

—Bien gracias, allí te dejé preparado tu desayuno.— Dijo mientras señalaba comida en una encimera.

Gracias.— Respondí sonriente.— Ah papá un amigo me invitó a su casa dentro de dos horas, puedo ir? —Dije recordando lo del rubius

—Segundo día aquí y ya tienes amigos? Wow, entonces ve tranquila, yo hoy trabajo casi todo el día.

—Graaaaacias! — Dije abrazándolo

—Ya que me vas a asfixiar.— Dijo riendo, su risa era contagiosa por lo que yo también reí.

Terminamos de comer y fui hacia la ducha para darme un baño, salí, me cambié, me maquillé un poco no tanto sólo un delineado en los párpados, me despedí de papá y me dirigí hacia la casa de el. Tome un taxi ya que me fije dónde quedaba en Google Maps y no quedaba tan cerca como para ir caminando. Cuando llegué recordé que era en un departamento y que vivía con Mangel, eso significa que también lo conoceré? Me emocioné al pensarlo, me baje del taxi y toqué el timbre.

—Quién es? — Me dijo una voz al otro lado del timbre.

—_____. — Respondí

—Dormilona! Ya bajo en un segundo. — Me dijo la voz del otro lado.

Esperé no mas de un minuto y ya estaba el allí abriéndome la puerta para entrar al edificio. Entré y lo saludé mientras el me miraba sonriente.

—Hola mi dormilona, como estas? — Preuntó mientras nos dirigíamos hacia su departamento.

—Muy bien y tu? — Respondí sonriendo. Esperen, me dijo que soy SU dormilona? No podía creerlo. Sentí que me ruborizé.

Rubius P.O.V

—Muy bien y tu? — Noté que luego de eso se ruborizó, supuse que era por mi comentario anterior.

—Bien, sabes que te ves muy tierna ruborizada? — Le dije, me daba risa como reaccionaba.

—No, no lo sabía. Pero gracias por hacérmelo saber. — Me respondió riendo. Llegamos y al entrar pareció emocionada por la cara que puso. Supongo que también veía los vídeos de Mangel, Vegetta y Alex ya que se quedó sorprendida de que estuvieran allí.

—Bueno dormilona este visco que ves aquí es Mahe, y esos dos del fondo son Vegetta y Alex. — Dije con un tono divertido.

Si lo se! — Me dijo con una gran sonrisa en su cara.

Tu debeh se' la shica con la que rubiuh' se ha encontrao la otra veh en la plaza. — Le dijo Mahe.

—Sip soy yo! — Dijo riendo sin quitar esa sonrisa que tiene desde que llegamos.

—Hola, soy Alex. — Le dijo amablemente.

Vegetta P.O.V.

—Yo soy ____ — Le respondió a Alex

Hola _____ yo soy Samuel, mejor conocido como Vegetta777. — Me presenté, ella soltó una risa. Debía admitir que era linda y su risa era contagiosa lo que provocó que todos riéramos.

Asi que Rubén, a que me has invitado? — Preguntó, parecía intrigada.

Porque les he hablado a ellos sobre tí y te querían conocer. — Le respondió Rubius. — Y no me llames Rubén no me gusta. — Se hizo el ofendido.

Claro claro lo siento. — Dijo riendo

Oye estamos jugando al Battlefield 4, quieres jugar? — Le pregunté

—Sii! — Respondió demasiado feliz, la verdad me dio ternura.

Estuvimos jugando un largo rato hasta que se tuvo que ir, no sin antes de pasarnos los números de celular. Era divertido pasar el tiempo con ella. No se porqué pero noté que Rubius nos miraba  a ____ y a mi algo serio, como celoso, pero no le dí mucha importancia.

Un viaje puede cambiarlo todo | Vegetta y tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora