"Halabeht Lelahel"

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El aire soplaba fuertemente, mis piernas estaban estáticas y mis labios entumecidos, quería salir corriendo, pero ninguna parte de mi cuerpo se movía, sólo podía sentir una pequeña presión en mi corazón y la necesidad de tener a Eizen conmigo.

—¿Estás loco?, ese tipo de bromas no se hacen— Respondí en cuanto recuperé él control.

—¿Acaso crees que esto es una broma?, no seas ignorante, te estoy diciendo la verdad.— dijo Arthuro demasiado dispuesto.

—De ser así, ¿Para qué viniste a verme?— dije.

—Esto no te lo puedo explicar aquí, tienes que acompañarme— respondió.

Arturo me tomó entre sus brazos y emprendimos un viaje a una gran velocidad, no sabía si esto era lo correcto, pero ya no me quedaba otra opción, quiero ver a Eizen de nuevo.

Llegamos a un lugar bastante caluroso, podía percibir un aroma familiar, había pequeñas bolas de fuego incrustadas en él suelo, él cielo se veía Carmesí y él ambiente era diferente.

—¿En dónde estamos?— Pregunté.

—¿No sabes en dónde estamos?, esto si que es extraño, ¿Que te hicieron en él mundo humano?, bueno, eso no importa, en este momento estamos en tu lugar de origen, el infierno.— Dijo

—¿E-el i-infierno?— contesté temerosa.

—Si, este es él lugar en donde puedes encontrar todo lo que estas buscando y yo te voy a ayudar.— dijo Arthuro.

En verdad que estaba sorprendida, Sergey me prohibió poner un pie en este lugar, mas sin embargo, aquí estoy, tratando de encontrar respuestas.

—Bien, ahora que ya estamos aquí, puedes hacer las preguntas que quieras y con gusto responderé lo que esté a mi alcance.— Dijo Arthuro.

—Esta bien, pero antes de comenzar, tengo que saber tu pasado, es decir, tu historia. Según lo que yo sé, tu eras un ángel pero... ¿Cómo terminaste siendo un demonio?—Dije.

—Hmm..., si que eres directa, esta bien te contaré.

Hace millones de años, cuando él mundo de los ángeles y de los demonios estaba en completa paz, yo pertenecía al escuadrón de batalla del Arcángel Gabriel y mi nombre de ángel era Halabeht Lelahel, era él mejor ángel defendiendo a nuestro reino, mi hermana, Helaine Lelahel, estaba muy orgullosa de mi, todo él tiempo me lo repetía. Un día, Helaine fue seleccionada para cumplir con una misión, El arcángel Gabriel dijo: Helaine, pronto vas a engendrar un hijo, él cual va a tener una misión muy importante que va a cambiar la perspectiva de todo lo que conocemos". Ese fue él momento en que me propuse a cuidar siempre de Eizen, sin importar lo que pase, yo voy a estar siempre con él, pero ese no fue el caso, una noche, nos enviaron a investigar él mundo conocido como "El infierno", él jefe tenía muchas sospechas sobre los Demonios, así que emprendimos él viaje y nos mantuvimos a distancia.
Pasaron días, semanas y no conseguíamos ver algo sospechoso.
La mañana siguiente desperté temprano y me dispuse a observar un poco mas cerca, me di cuenta de una casa que estaba al final del sendero, era una casa que llamó toda mi atención, me acerqué más y pude ver a una demonio, su cabello brillaba como él oro, sus ojos color Naranja me atraparon por completo y su canto... Su canto era muy hermoso..., desde ese día no pude dejar de mirarla.
Pasó él tiempo y ella se dio cuenta que la observaba, así que salió de su casa y dijo:

Dame Tres Segundos Y Te Diré Cuánto Te Quiero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora