SECUESTRADA

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Felipe no respondió a la pregunta, Kamil y yo estabamos enojados y mi jefe me presionaba para ya tener todo listo para el juicio.
Por estas razones estaba muy cansada y frustrada así que acepté salir con Kamil a una cita, no hablamos de trabajo, si no de nosotros. En un momento el trató de besarme, pero corrí la cara.

-Carla quiero que me mires a los ojos y me digas que no me amas. -Dijo después de que me corrí.

-Es que...Kamil...yo...no puedo hacer eso.

-Porque aún me amas.

-Si, pero no podemos discutir siempre por esto.

-No pararé de luchar por ti... hasta que me digas que no me amas más.

-QUIERES QUE LO DIGA...QUE GRITE...ESTÁ BIEN...KAMIL YO TE AMO, NUNCA DEJÉ DE AMARTE Y SABES QUE NO ME IMPORTA NADA...QUIERO ESTAR CONTIGO HASTA EL FINAL DE LOS TIEMPO...Y....Y...Y MIS HIJOS SERÁN TUS HIJOS...ESCUCHASTE TE AMO -Después de decir todas estas tonterías me tiré a los brazos de Kamil y le di un beso cargado de tantas emociones.

Cuando me desperté del apartamento de Kamil, me vestí y fuí a trabajar, pero no por mucho ya que empecé a vomitar así que volví a mi casa . Con tanto griterío y esa comida de ayer seguro me descompuse.