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Kamil

Por la mañana Carla fue a ver a Sam, cuando volvió tenía una expresión pensativa, pero me pidió que no haga preguntas entonces nos marchamos directo a la estación.
Era como cualquiera, había una parte para cargar combustible y otra como una cafetería/kiosco. Entramos, no había mucha gente, aún no eran vacaciones así que estaba bastante vacío a excepción de aquellos que querían hacer una escapada de la rutina. También había camioneros, entre otros. Al llegar al mostrador Carla abrió la boca por primera vez desde la mañana.

-Buen día, mi nombre es Carla, soy una oficial y vengo junto a mi compañero-me señaló-a retirar unas cintas del 18 de marzo, de este año.

-Ahhhhh si, si. Me dijieron que iban a venir a retirarlas. Mmm...las tengo en la parte de atrás siganme.-Dijo el gerente, parecía bastante amable y tenía un acento extranjero como ¿Mexicano?

-¿Puedo hacerle una preguntas mientras busca la cinta?-Le preguntó Carla al hombre que buscaba entre cajas la grabación.

-Claro, pregunte.- Respondió mostrando su sonrisa.

-¿Usted estaba atendiendo esa noche?

-Supongo, nunca falto al trabajo, este es mi segundo año.

-¿Tienen sonido las grabaciones?-Pregunté.

-Creo que no, para ese entonces aún no habíamos colocado los micrófonos...Ajá aquí están.

Tomamos la cinta y la pusimos a reproducir. Avanzamos hasta la hora donde se habrían marchado, entonces vimos un hombre con ropa oscura y gorra negra.

-¡Si lo recuerdo!-Exclamó el hombre, que aparentemente se llamaba Pedro.-Este hombre estaba, apurado y ansioso, compró dos Coca-Colas, unas twistos, dos paquetes de galletitas, una cindor, dos sanguches y se marchó. No dijo a donde iba, pero parecía un viaje largo ya que lleno todo el tanque y bueno la cantidad de cosas que compró.

Sé que es una pregunta boba pero tenía que hacerla.-¿Cómo se acuerda de todo lo que compró?- Una vez que lo dije en voz alta, me di cuenta de que soné mas idiota.Pedro se hechó a reir.

-Aquí tengo el inventario.

Carla me miró de una manera que me hacía parecer un imbécil, un niño pequeño.

-Con el tanque lleno ¿Hasta dónde se puede llegar?-Al final una pregunta inteligente salió de mi boca.

-Bueno yo diría que hasta El Pueblo Capital, pero tal vez  fueron más lejos ya que hay una estación más de camino al pueblo.

Carla se giró para hablarme a mí.

-Pídele a Tomy que revise todos los hoteles, departamentos o cualquier sitio de hospedaje en El Pueblo Capital, que los busque por el documento de Felipe o Helena.

Asentí y llamé a Tomy.

-Ok jefe, encontraré todo lo que me pide. Adiós.

-Chau Tomy.

Corté y luego nos dirigimos hacia la salida, no sin antes comprar chocolates para los antojos de Carla. Luego de despedirnos de Pedro volvimos a casa y nos fuimos a dormir.

SECUESTRADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora