Una vez has encontrado a alguien que te quiere para todo, es genial.
Empezamos a visitar pequeños pueblecitos de Cataluña; siempre que podíamos, hacíamos una excursión: hablabamos, visitavamos lugares nuevos, yo hechaba fotos mientras él aguantaba ser mi modelo. Desde esos días será siempre mi modelo favorito, toda fotógrafa necesita un muso.
Para alguien como yo, alguien a quién le encanta viajar y visitar lugares desconocidos, encontrar a la persona con quién hacerlo es un encuentro maravilloso. Te entran ganas de vivir mil aventuras, quieres encontrar siempre tiempo para seguir haciendo excursiones y viajes con esa persona.
Y seguimos viviendo aventuras juntos.